Baño de multitudes del expresidente de la Generalitat, y actual senador, Ximo Puig, en Callosa de Segura. Decenas de ediles y alcaldes de la Vega Baja han acudido al primer acto en el que participaba Puig tras iniciarse el proceso que lo relevará como secretario general del PSPV-PSOE, para celebrar el centenario de una de las agrupaciones más grandes que tienen los socialistas en la comarca. Muchos saludos y abrazos de compañeros de formación en una comarca a la que Puig asegura siempre tener un especial “cariño”, este jueves lo ha vuelto a decir, y que, sin duda, es la que más ha visitado en sus ocho años al frente del Consell, con el Plan Vega Renhace como bandera.

Pero esta vez, el proceso de sucesión en el PSOE ha centrado tanto los corrillos de las conversaciones como las preguntas de los periodistas. Tras el acuerdo forzado desde Ferraz para imponer a Diana Morant como única candidata a relevar a Puig, integrando a los otros dos precandidadatos, el ilicitano Alejandro Soler, quien, por cierto, pese a que estaba prevista su presencia en el acto en Callosa, finalmente no ha acudido, y el mislatero Carlos Fernández Bielsa, Puig ha indicado que no está “en los detalles” y que él asumió su responsabilidad dando un paso atrás y dejando la secretaria general del PSPV. “Mi responsabilidad es pensar qué es lo mejor para la sociedad valenciana y para el Partido Socialista, y en ese periodo he pensado que era bueno generar una transición positiva que le diera a los valencianos la oportunidad de mirar hacia adelante. A partir de ahí, los protagonistas de estos momentos son otros”.

El senador adelanta que firmará el aval por la ministra Diana Morant, a quien, asegura, apoyará “en la medida de lo que pueda”, pero, eso sí, ha añadido que “sin estorbar”. Sobre si el pacto es la mejor alternativa que tenía el PSPV, ha señalado que el proceso lo que determina es que haya un grado de cohesión grande y “una capacidad de integración”, aunque reconoce que todo ello también hubiera sido posible con la otra vía, que los tres precandidatos se hubieran tenido que enfrentar en el proceso de primarias. “Al final la determinación del proyecto está en la sociedad, no en mirarnos en nosotros mismos”, ha espetado el socialista. 

Sobre la persona que lo relevará al frente de la secretaría general del PSPV, solo ha tenido palabras de elogio y considera que el liderazgo de Morant “será sólido”. No obstante, ha querido poner en valor lo que considera fundamental: “La plasmación de la igualdad de la mujer y del hombre”. En este sentido, señala que le parece “extraordinario” que sea la primera secretaria general del PSPV y, en 2027, “ojalá sea la primera presidenta de la Comunidad Valenciana”.

Ximo Puig interviene en el acto celebrado en Callosa de Segura Rubén Míguez


Puig ha querido alejarse de las “diferencias que haya podido haber” en el seno del partido y ha pedido a los militantes “mirar hacia adelante” para combatir a la derecha y a la extrema derecha que gobierna en la Comunidad Valenciana “que están haciendo retroceder las oportunidades de los trabajadores y de la mayoría social”, ha zanjado. 

El acto en Callosa, en el que también se ha podido ver al incombustible Ángel Franco y a los diputados socialistas Ramón Abad, David Bernardo, Charo Navalón yYaissel Sánchez, ha finalizado con el descubrimiento de una placa por parte de Puig y del secretario de la agrupación local y edil, Fran Maciá, y el canto de la Internacional en la que el ex jefe del Consell ha puesto mucho ímpetu, aunque sin levantar el brazo como sí lo tenían las decenas de militantes que han asistido a un acto. Un cóctel ha puesto el broche a la celebración del centenario de la agrupación socialista callosina.