El Banco de Inglaterra (BoE) se mantendrá en pausa. De hecho, los expertos creen que será más reticente que otros bancos centrales a la hora de bajar los tipos de interés. En la reunión que celebra este jueves, la previsión es que siga con su tono agresivo y no ofrezca pistas sobre cuándo hará recortes. Pero en lo que los analistas no se ponen de acuerdo es en cuándo llegará ese momento.

Hay que recordar que tanto la Reserva Federal de EEUU (Fed) como el Banco Central Europeo (BCE) han insinuado de una u otra manera que se prevén recortes de tipos este año. Sin embargo, el Banco de Inglaterra no ha hecho lo mismo.

Ya en la reunión de diciembre tuvo cuidado de no decir nada que pudiera malinterpretarse como un respaldo a la valoración del mercado de los recortes. Y desde entonces ha habido silencio por parte de los miembros del Comité de Política Monetaria.

«La realidad es que defender una postura de tipos de interés más altos durante más tiempo se está volviendo más difícil a medida que el contexto de inflación muestra signos de mejorar», comentan en ING. Esperan que el BoE abandone la pretensión de que podría volver a subir los tipos, pero continúe indicando que seguirán siendo restrictivos durante un período prolongado, y que los tres ‘halcones’ que habían estado votando a favor de una subida de tipos en diciembre finalmente tiren la toalla.

La apuesta de la entidad es que agosto es el punto de partida más probable para los recortes de tipos, «dado que la inflación de los servicios y el crecimiento de los salarios seguirán siendo rígidos en el corto plazo«.

Para Julius Baer, al organismo británico no le queda más remedio que seguir siendo agresivo ante la volatilidad de la inflación, a medida que regresa a su objetivo y cierta evidencia de presión inflacionaria persistente. «En comparación con otros bancos centrales, es probable que el BoE recorte los tipos de interés bastante tarde«, coinciden. Su expectativa es que un primer recorte de tipos llegará en junio, «pero los riesgos parecen sesgados hacia un recorte posterior», matizan.

Por lo tanto, ven que el BoE no parece tener más remedio que atenerse a su postura política actual y que «el único cambio podría ser una reducción del sesgo hacia nuevas subidas de tipos, como en la reunión de diciembre, donde tres miembros del Comité de Política Monetaria votaron a favor de una subida, frente a seis que votaron a favor de mantenerla».

También consideran que el BoE «seguirá adoptando un tono agresivo» en Berenberg, donde ven probable que el banco recorte los tipos en junio. Y opinan igual: que «mientras que los responsables de la política monetaria de la Fed parecen felices de validar las expectativas de los mercados financieros de que los recortes de tipos están a la vuelta de la esquina, no esperamos que los responsables del BoE den un visto bueno similar a los mercados este jueves«.

De cara a los próximos encuentros vaticinan que, en la reunión de marzo, un mayor avance de la inflación debería abrir la puerta para que los ‘halcones’ abandonen su preferencia por nuevas subidas. En la reunión de mayo, el BoE debería poder perder su sesgo agresivo y señalar que la política monetaria puede volverse menos restrictiva, preparando a los mercados en junio para un primer recorte de 25 puntos básicos.

«Seguimos esperando recortes de 125 puntos básicos en 2024, seguido de otros 100 puntos básicos en 2025. En 2026, es probable que el BoE comience a subir los tipos nuevamente a medida que las presiones inflacionarias estructurales vinculadas a la escasez de mano de obra y las fricciones comerciales globales comiencen a reflejarse en los salarios y los precios al consumidor», añaden.

En las mismas fecha se mueven en Danske Bank: «Esperamos que el BoE prepare a los mercados para un próximo recorte de tipos en la reunión de mayo, mientras realiza el primer recorte de 25 puntos básicos en junio y posteriormente recortes de 25 puntos básicos en los trimestres siguientes, totalizando 75 puntos básicos de recortes para 2024″. En este caso, no ven al BoE desviarse de la Fed y el BCE.

Mientras, en Oxford Economics no esperan que la mayoría de los miembros del Comité de Política Monetaria del BoE adopte una posición de recorte de tipos hasta al menos mayo, cuando prevén una bajada de 25 puntos básicos. «En general, esperamos un total de 100 puntos básicos de recortes este año, aunque los riesgos se inclinan hacia que el primer recorte se produzca más tarde y los tipos caigan más lentamente«, exponen.

Finalmente, en Pantheon Macroeconomics manejan que habrá recortes de 75 puntos básicos en 2024, pero el primero de 25 puntos básicos «no se producirá hasta mayo, o tal vez incluso junio».