Emel está muy triste desde que su profesora del colegio le dijo a ella y a sus compañeros que deberían comprarse un disfraz para una obra de teatro en el colegio.

A la pequeña de los Eren le gustaría ir vestida de princesa, pero decide no contárselo a sus hermanos para que causarles problemas y que no se sientan mal por no poder comprárselo.

Emel va a comprar comida con Asiye y la pequeña se queda deslumbrada con vestido de princesa que ve en el escaparate de una tienda mientras se visualiza con él puesto en la obra de teatro del colegio.

“Te gusta mucho ese vestido. ¿eh?”, le dice Asiye a su hermana pequeña al darse cuenta, mientras Emel le responde que mucho, aunque sabe que nunca podrán comprarlo porque no tienen dinero.