El Real Madrid sufrió, pero se acabó llevando su vigesimoprimera victoria de la temporada en Euroliga. Esta vez hizo morder el polvo a Maccabi (106-101), un conjunto israelí que plantó cara a los de Chus Mateo durante todo el encuentro. [Narración y estadísticas del Real Madrid 106-101 Maccabi].

El triunfo, el duodécimo en doce partidos en el WiZink, estuvo marcado por una gran actuación ofensiva de los blancos. Musa, Hezonja y Poirier fueron los más destacados, pero todos los jugadores pusieron su granito de arena para seguir comandando con puño de hierro la competición.

Quien no tuvo su mejor noche fue Lorenzo Brown. El base español vivió un partido para olvidar y necesitó trece lanzamientos para sumar sus primeros puntos. Revivió en los últimos compases del choque, pero no fue suficiente para evitar la derrota de su equipo.


Poirier lanza ante Nebo

EFE

El Real Madrid salió muy concentrado al choque. Dejó atrás las malas sensaciones ante el Gran Canaria y saltó al parqué del WiZink dispuesto a sumar un nuevo triunfo que le permitiera seguir dominando con puño de hierro la Euroliga.

Los de Chus Mateo estuvieron acertados en ataque, pero destacaron especialmente en el juego defensivo durante los primeros compases de juego. Dejaron a Macabbi en un tímido 2-10 en tiros de dos en los primeros siete minutos y se mostraron muy fiables en la parcela ofensiva gracias a un inspiradísimo Mario Hezonja

El croata, recuperado para la causa de sus molestias, fue el máximo anotador del primer cuarto para los blancos haciendo mucho daño desde el tiro exterior. Poirier y Deck también destacaron en la anotación y Facu Campazzo se dedicó a repartir el juego. La superioridad del Madrid era clara y se marchó con once puntos de ventaja al segundo parcial.

Salió mejor de la pausa el Maccabi, acertado en los tiros y con más velocidad de balón. El conjunto blanco no fue menos y mantuvo su distancia durante los primeros minutos del segundo cuarto. Los de Chus Mateo, eso sí, vivieron unos minutos de zozobra a mitad de parcial y el técnico madrileño tuvo que pedir tiempo muerto. 

No le vino mal el parón a los blancos, pero cerraron el segundo parcial con algo de dudas. Maccabi mejoró en ataque y encontró situaciones muy cómodas de tiro que le permitieron recortar distancias y marcharse al descanso tan solo siete puntos por debajo. 

Máxima igualdad

El tercer cuarto tuvo un guion muy similar al del segundo parcial. Maccabi siguió entonándose y el cuadro israelí se mostró cada vez más cómodo sobre el parqué del WiZink. Todos menos Lorenzo Brown. El español vivió un partido para olvidar. Con más de 25 minutos jugados el base firmaba un escalofriante 0/9 en tiros. Actuación para muy errática en el lanzamiento, pero por lo menos productiva en la circulación (9 asistencias).

Maccabi se mostró fuerte en la línea de tiros libres. Llegó al último cuarto sin fallar ninguno de sus intentos y puso en apuros a un Real Madrid que sostenía el ritmo con un Campazzo que comenzaba a crecer.

Dzanan Musa, ante Maccabi


Dzanan Musa, ante Maccabi

EFE

Macabbi llegó a ponerse a un punto, pero un parcial de 8-2 de los blancos en el último minuto del cuarto dejaron la ventaja en siete para los de Chus Mateo. Hezonja y el ‘Chacho’ Rodríguez anotaron dos triples que hicieron daño a los visitantes.

El inicio del último cuarto fue demoledor para el Madrid. Con un parcial de 9-0 llegaron hasta su máxima renta del partido (13 puntos) provocando un tiempo muerto del técnico visitante que veía como el choque comenzaba a decantarse. Sin embargo, su equipo reaccionó con otro parcial de 0-11 y el partido volvió a estar en un pañuelo.

Los últimos minutos fueron un intercambio de golpes constantes. Yabusele se hizo grande y Poirier cazó un rebote ofensivo que acabó en mate que fue fundamental para el resultado final. Un gran palmeo a menos de un minuto que dejó en +4 la ventaja local. Baldwin anotó un triple estratosférico para dar pimienta al partido, pero los de Chus Mateo cerraron la faena desde el tiro libre.