«El impuesto a la banca en España tiene un impacto para BBVA de 285 millones de euros en 2023. Considero que es contraproducente para la economía. Los bancos jugamos un papel importante en canalizar el ahorro hacia la inversión productiva y seguimos defendiendo que no tiene mucho sentido. El impuesto dificulta que canalicemos el crédito y poner un impuesto no ayuda a fomentar la inversión».

Son las palabras de Carlos Torres Vila, presidente de BBVA, durante la rueda de prensa de la entidad para presentar sus resultados del cuarto trimestre y del conjunto de 2023. «Nuestras previsiones para 2024 es que será mejor que 2023«, ha añadido el dirigente.

Sobre la remuneración al accionista, ha indicado que «nuestro objetivo es devolver el exceso de capital a los accionistas a lo largo del tiempo, como hemos venido haciendo en los últimos años».

Sobre la participación en Telefónica y la entrada de inversores saudíes y del Gobierno español en el capital, ha señalado que «estamos cómodos con nuestra participación financiera y la entrada de inversores refleja el potencial de la compañía».

Al ser cuestionado sobre posibles operaciones corporativas, ha indicado que «siempre analizamos las opciones, pero enfatizamos nuestro crecimiento orgánico«.

Sobre Turquía, ha comentado que «es una franquicia que nos ha aportado más de 500 millones de euros al beneficio, pero en una situación de estabilización económica y de la inflación, puede ganar 2.000 millones. Pero esto requiere un periodo de normalización de un par de años«.

Por su parte, el consejero delegado de BBVA, Onur Genç, ha señalado que «tenemos ya 400.000 clientes en Italia, y creo que podemos decir que, para finales de 2024, estaremos ya en 600.000 clientes. Estamos viendo la posibilidad de ampliarlo a otros dos países en los próximos uno o dos años«.