Tras un programa lleno de grandes momentos con los invitados, Moisés y Óscar han protagonizado un duelo sorprendente en El Rosco. Lo ha sido porque se han quedado muy pronto sin opciones de ganar el bote, que ya asciende a 1.396.000 euros. Ante esta inusual circunstancia, han librado una partida tensa en la que el objetivo ha sido precisamente no competer más errores…, aunque los ha habido.
El primer tropiezo lo ha tenido Óscar. Tras un gran arranque de siete aciertos, se ha visto frenado en seco en su segundo turno con un estrepitoso fallo en la M. Roberto Leal le ha pedido la onomatopeya con que se imita la voz del gato y él no ha dicho “miau”, sino que ha respondido “maullido”. Acto seguido, ha llegado el traspié de Moisés. En su caso ha sido en la F, con “el sacerdote que, entre los romanos, declaraba la guerra y concertaba la paz”.
Antes de terminar la primera vuelta, Óscar ha cometido su segundo error. Con la V, un matiz en la respuesta le ha puesto la letra en rojo y su Rosco, cuesta arriba.
El primer punto en el que ambos concursantes se han encontrado en el marcador ha sido con 19 aciertos. Esa igualdad se ha mantenido hasta volver a empatar con 21, lo que ha llenado de suspense el desenlace. Cualquier nuevo acierto o fallo puede ser clave. ¡Descúbrelo en el vídeo!
Entre los mejores momentos de este programa ha estado el broche que Ismael Serrano ha puesto a su visita a Pasapalabra. Lo ha hecho acompañado de su guitarra y cantando Me amo, uno de los temas de su álbum La canción de nuestra vida.
Él mismo ha explicado qué quiere transmitir con su letra: “Es como una declaración de amor a uno mismo, un ejercicio de amor propio, porque hay que quererse y cuidarse un poco más”. Sin duda, ha cautivado a todos con su voz y con este mensaje.