En el minuto 70 De Burgos Bengoechea señaló penalti de Gayá a Molina, y el VAR le corrigió. 

El defensa argentino del Atlético de Madrid Nahuel Molina disputa un balón ante José Luis Gayà defensa del Valencia 

chema Moya / EFE

Minuto 70 de partido entre el Atlético de Madrid y el Valencia con los rojiblancos venciendo por 2-0 a los valencianistas. En un ataque de los colchoneros, Molina pisa área y ve como Gayá le roba el balón por detrás. De Burgos Bengoechea no lo duda ni un instante y señaló la pena máxima.

Pues bien desde el VAR, González Fuertes le avisó: “Richi, por favor, te recomiendo que vengas a verla para un potencial no penalti. El defensor toca el balón y no impacta en el delantero como para ser sancionado como penalti”.

El colegiado de campo acepta, y tras ver la jugada repetida en el monitor le explica que “para mí le golpeaba en la pierna. Pero toca claramente el defensa balón. Balón a tierra para el defensa. Cancelo el penalti”.

Una conversación normal y que ayudó al Valencia a que los rojiblancos no terminasen de sentenciar el partido en ese momento. En esta ocasión, el VAR fue una herramienta que ayudó al árbitro que estuvo sobre el césped del Metropolitano. 

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Walter Zimmermann

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