Joan Buades | Escritor e investigador
«El giro radical del discurso hotelero es paralelo al de todas las industrias fósiles a escala mundial (energéticas, agroganaderas, transporte aéreo y marítimo, petroquímica…). Han pasado de negar el problema a convertirse en solucionadores según su propia propanda. Esto refleja que ya no pueden negar la gravedad global de la crisis climática y ambiental: esta es la parte buena. Sin embargo, hacen realidad el aviso de George Orwell: la guerra es la paz; el odio es amor; la mentira es la verdad. Los grandes hoteleros hacen guerra cultural para monopolizar el lenguaje de los movimientos y personas críticas con una deriva sistémica suicida en términos climáticos, ambientales y de justicia tanto en el Sur empobrecido como en las generaciones futuras. Se parecen a esos gobiernos que sólo hacen tuits sin tocar ni una coma de la realidad: ninguna hotelera ha publicado su huella climática incluyendo sus flujos de transporte aéreo, alimentarios y de materiales. Ninguna hotelera permite una búsqueda independiente sobre su descarbonización. La mayor parte de los grandes hoteleros viaja en jet privado, el súmmum de no-circularidad, economía fósil y consumo antisocial y contra natura».
Ivan Murray | Geógrafo
«Estas ferias suelen ser grandes ceremonias donde se celebran rituales de exaltación de los mitos turísticos. Fitur sirve de altavoz de los eslóganes de las elites políticas y corporativas. Resulta habitual que los jefes de prensa y otros creadores de contenidos se hagan eco de lo que debe decirse en estas celebraciones. Por eso, desde hace décadas, desde Davos a otro tipo de reuniones similares, se escuchan mensajes a favor de la justicia, la igualdad y la sostenibilidad, entre otros. En todo caso, estos mensajes nos indican también la dirección en la que se han dirigido las políticas corporativas. Precisamente, las opuestas a aquellas declaraciones de buenas intenciones: beneficio y crecimiento, o morir. En Fitur se han escuchado mensajes contradictorios. Por un lado, un llamamiento a la necesidad de establecer límites, de replantear el turismo teniendo en cuenta las fronteras planetarias; y, por otro lado, los anuncios de beneficios extraordinarios y proyectos de internacionalización desenfrenada. No obstante, lo que resulta cada vez más evidente es que las condiciones del siglo XXI son totalmente diferentes a las de la segunda mitad del siglo XX que propiciaron la gran transformación de Baleares con el ascenso del turismo de masas. Aquello fue posible gracias a una situación de petróleo abundante y barato, además de unas condiciones climáticas más estables. Sobre la idea de referéndum lanzada en Fitur, me gustaría decir que en Mallorca hemos tenido diferentes expresiones sociales que expresaban la necesidad de establecer límites a la turistificación. Una de las más interesantes fue la Assemblea Ciutadana pel Clima de Mallorca. Pese a la importancia del proceso y sus resultados, la opinión de las elites hacia la democracia ha quedado demostrada con el rechazo por parte del Consell de incorporar las propuestas de la Assemblea con más de un 90% de apoyo».
Margalida Ramis | Presidenta del GOB
«La antesala de este cambio en el relato fue la Cumbre de Ministros de Turismo en Palma. Se habló de gentrificación, de los impactos en la vivienda. Todo terminó con la misma conclusión de siempre, queremos más fondos de Europa. El cambio en el discurso en Fitur parece que viene marcado en buena parte por Exceltur y sobre todo los hoteleros. Si se hace una lista de palabras empleadas, aquello parecía una reunión de ecologistas. Pienso que están viendo que ya no tienen la misma aceptación social de antes y que el turismo está generando malestar en muchas partes. Entonces se están avanzando y adoptando un discurso social, hablando de turismo cultural por ejemplo, cuando de lo que se trata es de seguir exprimiendo pero por una nueva vía. Es una clara estrategia para rebajar la oposición. Durante estos últimos ocho años de Pacte de Progrés se ha estado haciendo lo mismo, los hoteleros han tenido buenos maestros. Y también nos estamos enterando de algunas políticas públicas directamente en Fitur, una feria donde los protagonistas son los mercados. No me parece el lugar más adecuado. Por otra parte, tengo la sensación de que se prepara una ofensiva del sector turístico en connivencia con el sector público. Llama la atención el plan recién presentado para simplificar trámites administrativos, donde también entraría la Comissió de Medi Ambient, que se encarga de las evaluaciones de impacto ambiental de los proyectos. Prohens aseguró además que todos los sectores le habían trasladado que el organismo se excedía en sus funciones. Es preocupante. Es necesario resaltar la incoherencia entre este cambio en el relato, más social ahora, y los intentos de desregular los sectores económicos y el turístico con el levantamiento de la moratoria ya anunciado y con la futura agilización de trámites».
Supera su previsión La Feria de Turismo cierra hoy domingo
La 44ª edición de Fitur llega hoy a su fin tras abrir ayer sus puertas al público general en su convocatoria más ‘inclusiva’, con la primera edición de Fitur 4all -cuyo objetivo es fortalecer la calidad, diversidad e inclusión en la oferta turística -, y después de haber superado la previsión inicial de visitantes durante las tres jornadas dedicadas exclusivamente a profesionales, en las que recibieron un total de 153.00 asistentes, un 12% más que en 2022, lo que refleja la total recuperación del sector turístico.