El plan de refuerzo educativo en matemáticas y comprensión lectora anunciado por el presidente del Gobierno en un mitin electoral se ampliará a bachillerato y FP básica. En total, 5,2 millones de alumnos y alumnas. Así lo ha asegurado esta mañana la ministra de Educación y FP, Pilar Alegría, tras reunirse con miembros del Consejo Escolar del Estado para consensuar una postura respecto al uso de los móviles en las aulas.
El programa no está todavía concretado. Tampoco su presupuesto, aunque se bajara una cantidad aproximada de 500 millones de euros. El objetivo es que haya una bajada de ratios (algo que se hizo ya en pandemia) para que el aprendizaje sea más efectivo y personalizado. Incluso, un desdoble de clases. También lecciones extraescolares gratuitas en el mismo centro educativo para los estudiantes que más lo necesiten.
Fuentes del Ministerio de Educación destacan que el refuerzo no será igual en todos los centros, sino que dependerá del tipo de alumnado y de la complejidad de las aulas, una reivindicación de la comunidad educativa. Es decir, habrá más refuerzo en aquellos colegios e institutos con un mayor número de estudiantes con más necesidad y peor rendimiento académico.
Si en un primer momento se habló de que el plan empezaría en primaria (en el caso de las matemáticas, a partir de 3º) y llegaría a 4º de ESO (último curso de la educación obligatoria), Educación opta ahora por alargarlo a los dos cursos de bachillerato y también la Formación profesional básica. En total, 5,2 millones de estudiantes.
PISA
El programa electoral del PSOE, en su página 102, ya incluía un plan de refuerzo de matemáticas y comprensión lectora, dos asignaturas fundamentales en las que el alumnado español pincha. También el internacional. El último informe PISA, publicado en diciembre, reveló que España ha caído ocho puntos en matemáticas respecto a 2018; Catalunya, 20; y la media de los países de la OCDE, 15. Se trata de un bajón sin precedentes en la historia del programa internacional, que evalúa a los chavales y chavalas de 15 años. PISA, además, hace hincapié en la ansiedad que generan las matemáticas en el aula.
La comprensión lectora -leer y entender lo que se lee- tampoco atraviesa su mejor momento. El informe PIRLS otorga en España 521 puntos a la comprensión lectora de niños y niñas de 4º de primaria. En la edición anterior (2016) la puntuación fue de 528. En el caso catalán, el resultado es peor: 507, solo por encima de Melilla (498) y Ceuta (496).
Uno de cada cuatro alumnos terminan la educación secundaria con dificultades para comprender un texto mínimamente complejo
Muchos pedagogos recuerdan que la lectura es la primera destreza que debería asegurar la escuela. Es también “el mejor predictor del éxito académico futuro”, asegura el filósofo y pedagogo Gregorio Luri en ‘Sobre el arte de leer. Tesis sobre la educación y la lectura’ (Plataforma actual). Algo esencial teniendo en cuenta que uno de cada cuatro alumnos y alumnas terminan la educación secundaria obligatoria con notables dificultades para comprender un texto mínimamente complejo.
El plan gubernamental incluye la intención de enseñar las matemáticas de manera que no produzca ansiedad en los chavales y chavalas. Respecto a la lectura, se trata de algo más transversal que se dará en varias asignaturas y que se podrá llevar a cabo fomentado, por ejemplo, algo que ya se hace en muchas aulas: presentaciones orales. De lo que se trata es de fomentar la competencia lingüística.
El plan del Gobierno también cambios en el profesorado para que se refuerce la formación continua que reciben en matemáticas y que muchas veces depende de su propio interés ni tanto porque haya una formación institucional y reglada.
