Nenad Bjelica, entrenador del Union Berlín, y Leroy Sané, extremo del Bayern, se enzarzaron el pasado miércoles durante el partido entre el equipo berlinés y el muniqués en el Allianz Arena. Un encuentro aplazado que el Bayern ganó por 1-0. Bjelica dio dos veces a Sané en la cara presionándole con la palma de la mano y ahora está por ver la sanción que le puede caer al ex jugador del Albacete, Betis y Las Palmas, quien fue expulsado y quien además aseguró que no se arrepiente.
Como confirmó el jueves la Federación Alemana de Fútbol (DFB), Bjelica está «inicialmente suspendido» para el próximo partido del Union Berlín contra el Darmstadt, que se disputa este domingo.
Antes del próximo encuentro, según dicho organismo, debería emitirse un veredicto sobre el castigo exacto.
Las reglas de la DFB establecen lo siguiente: “La agresión ocurre cuando el jugador usa intencionalmente la fuerza física contra un oponente. Patear, golpear, empujar, morder y escupir son delitos típicos. Pena: de al menos seis semanas a seis meses”.
Si el oponente cometió un acto contrario al espíritu deportivo inmediatamente antes de cometer la infracción, esto puede tener un efecto atenuante sobre la sanción. Por regla general, la pena mínima es de tres partidos, lo mismo se aplica si se trata de un caso leve de agresión.
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Bjelica se enzarzó el miércoles con Leroy Sané. Cuando el balón salió fuera del campo cerca del banquillo de los berlineses y el jugador del Bayern quiso coger el esférico para sacar de banda, el técnico del Union retuvo la pelota con la mano.
Cuando Sané cogió el balón, Bjelica claramente agarró dos veces al internacional alemán en la cara. El técnico no quiso disculparse con Sané por entender que le había provocado. El propio Sané habló con Bild y dijo que no le guarda rencor. El croata estaba caliente porque justo antes consideró que se le habían negado a su equipo un penalti, lo que provocó sus airadas protestas.
