Encrucijada política para Podemos, también en la provincia de Alicante. La formación morada no atraviesa su mejor momento, una situación que no es una novedad ni para sus militantes ni para sus simpatizantes, que han visto como en los últimos años -y enfatizado por el «batacazo electoral» de las pasadas elecciones autonómicas y municipales del 28M- la presencia del partido ha ido perdiendo fuerza tanto a nivel local, como provincial y autonómico.

Una derrota electoral que en su momento propició un goteo de salidas de sus principales representantes, como el de la coordinadora autonómica y candidata al Ayuntamiento de València, Pilar Lima; el candidato a la Generalitat, Héctor Illueca, o del que fuera el coordinador del partido en Alicante, Xavier López, entre otros. Desde entonces, la estructura autonómica quedó pilotada por una gestora y, ahora, la dirección autonómica se encuentra inmersa en un proceso de primarias en el que los militantes podrán decidir entre tres candidaturas – encabezadas por Agustí Pérez, Arantxa Torres y la oficialista María Teresa Pérez– en un proceso electoral que terminará el próximo 2 de febrero, cuando se cierre la votación, y tras las que previsiblemente se dará el pistoletazo de salida a reconstruir los consejos locales de coordinación del partido a nivel local.

Un proceso que en la provincia esperan especialmente las localidades de Alicante y Alcoy. En ellas la formación morada también se encuentra liderada por una gestora de características similares tras las dimisiones de sus líderes, Xavier López y Trini Rubio, respectivamente, que no obtuvieron representación en sus respectivos Ayuntamientos.

Una noticia que también sirve de aliento a otras agrupaciones locales, como la de Elche, donde los militantes esperan a renovar su consejo local desde el pasado mes de octubre, pero que no cambia la vida de la formación en la Vega Baja, donde los círculos llevan años desactivados, y que necesitaría algo más que una votación para «resucitar» a la militancia.

Alicante

En este contexto, la localidad de Alicante se encuentra en el epicentro del cambio. Hace tan solo 15 días que se constituyó la gestora encargada de liderar a la agrupación en la localidad. La dirección provisional estaría compuesta actualmente por nueve personas, según fuentes del partido, y pese a los desafíos, se muestran con confianza por la «fuerte implicación» de los militantes que les brindarían una base sólida para seguir apostando por la localidad.

Desde la formación atribuyen las dificultades tras las elecciones municipales del 28M a cuestiones personales, como el caso de la marcha de Xavier López a Sumar. El que fuera portavoz de Podemos en Alicante forma parte del grupo político de Sumar en el Congreso de los Diputados y trabaja desde hace un mes como asesor para la Comisión de Sanidad, que preside Agustín Santos, número dos de Sumar por Madrid.

La nueva gestora estaría apostando por mantener su presencia en Alicante, una ciudad que consideran «clave» para la estabilidad del partido en la Comunidad Valenciana. La incógnita radica ahora en quién constituirá el equipo que dirigirá el futuro del partido en la capital de la provincia una vez se celebre la esperada renovación de su consejo local de coordinación y si el proyecto tendrá recorrido hasta las próximas elecciones municipales de 2027.

Elche

La situación de Podemos en Elche presenta un escenario de perfil bajo, algo habitual para la formación en la localidad. Después de haberse presentado a las elecciones municipales en tres ocasiones, y sin haber logrado obtener representación municipal en ninguna de ellas, el partido nunca ha contado con una gran presencia política en la ciudad a pesar del peso que tiene esta para la Comunidad Valenciana.

Pese a la falta de militantes y de apoyos firmes, la formación parece no rendirse. Actualmente, continúa liderada por la ilicitana Anabel Mateu, que actúa como portavoz en la localidad, aunque desde el pasado mes de octubre los militantes se encuentran pendientes de que se realice una convocatoria que ayude a renovar la formación a nivel municipal después de los malos resultados que obtuvieron, nuevamente, en las elecciones municipales.

Esta espera y la falta de concejales en Elche ha hecho que, actualmente, la actividad política de la formación morada ilicitana haya experimentado un «bajón», que muchos militantes atribuyen a la falta de impulso para llevar a cabo elecciones internas y al «parón» nacional tras los malos resultados electorales.

Vega Baja

Un territorio en el que la formación comenzó con buen pie, pero donde ha ido deshinchándose, es la Vega Baja. Concretamente en Orihuela, donde la confluencia Cambiemos Orihuela ha acabado por absorber a la poca militancia que la formación morada conservaba en la localidad. Actualmente, ya no queda representación de Podemos en la coalición, y el círculo de Podemos en Orihuela se disolvió en torno al año 2021, ya que sus integrantes habrían pasado a militar en Cambiemos Orihuela.

Aunque se intentaron llevar a cabo procesos de reactivación antes de las elecciones municipales del año pasado, la desilusión y la falta de apoyo de la dirección en València llevaron a los militantes a tomar la decisión de no reactivar ninguna estructura. María García Sandoval, quien representó a Podemos en el Consistorio oriolano de 2019 a 2023, se dio de baja de la formación después de su mandato como concejala en la anterior legislatura. Actualmente, no hay círculo en Orihuela y, por lo tanto, no hay una gestora activa ni esperanza de recuperarla.

Por otra parte, existe la circunstancia de que, en toda la Vega Baja, Izquierda Unida ha sido históricamente el partido de referencia para los votantes a la izquierda del PSOE, con una fuerte representación en varios municipios. Aunque Podemos tuvo presencia en algunas localidades de la comarca, como Callosa del Segura o en Guardamar, la falta de consolidación y la pérdida de representación han marcado la situación actual en la que la formación es prácticamente inexistente en la comarca.

En Torrevieja, Podemos tampoco cuenta con una gran base de militantes y, por ello, tampoco ha hecho falta implementar una gestora. La formación, que en este municipio conformó un proyecto junto a Izquierda Unida y Alternativa Republicana para concurrir de forma conjunta a las elecciones municipales de 2023, no obtuvo representación. Tras el periodo electoral poco se sabe de la actividad de la formación en el municipio, en el que nunca se llegó a conformar una base sólida de militantes.

Alcoy

Actualmente, Alcoy es una de las localidades en el que el partido se encuentra controlado por una gestora. La dimisión de su alcaldable, Trini Rubio, tras el mal resultado electoral en las elecciones municipales del pasado 28M dejaron a la formación sin liderazgo y ahora la incertidumbre persiste en torno a la existencia del círculo de Alcoy y su participación en el nuevo proceso de elección y liderazgo.

Los malos resultados electorales, que dejaron a la formación sin los dos concejales con los que contaba en el anterior mandato, Cristian Santiago y Aarón Ferrándiz, y sin la diputada autonómica alcoyana en las Cortes, Naiara Davó, llevó al partido a tomar la decisión de desmantelar la sede por la falta de recursos financieros. Por su parte, Rubio asegura que su dimisión fue una decisión que tomó a nivel individual y que comunicó a la formación durante las semanas posteriores a las elecciones.

Ahora, la situación de Podemos en Alcoy refleja la complejidad y los retos que enfrenta el partido a nivel local, resaltando la necesidad la reorganización y la falta de liderazgo que deberá solucionarse con una votación que ponga fin a la actual gestora.

Marina Alta y Marina Baixa

En las comarcas de la Marina Alta y la Marina Baixa, Podemos como formación política tampoco se encuentra presenta en casi ningún ayuntamiento. La única excepción es la de Marta Gómez, concejala de la formación morada en La Nucia, donde Podemos se presentó bajo el nombre Alternativa per La Nucia en coalición con Compromís en las elecciones municipales del pasado 28 de mayo. En el resto de municipios de la Marina Baixa la formación no cuenta con representación, aunque sí que mantiene todavía algún círculo activo en localidades como Finestrat o Benidorm, localidad en la que la actividad se mantiene pese al bajón tras las elecciones.

En Dénia, la estructura del consejo ciudadano municipal sigue operativa, sosteniendo la organización hasta que se designe una nueva coordinadora a nivel autonómico. La portavoz en la localidad continúa siendo, hasta nuevo aviso, Cristina Molinillo, que sigue acompañada por Juanjo Nieves, el que fuera candidato a las elecciones locales de Podem Dénia. En este municipio la formación morada continúa teniendo presencia de militantes pero, sin embargo, ha sido incapaz de volver a obtener representación municipal desde que en las elecciones del año 2015 obtuvieron tres concejales.

En la Marina Alta, Podemos continúa en funcionamiento en las localidades de Xàbia, Calp o Moraira. Pese a la resistencia que mantienen los militantes de la formación morada en las localidades de la costa, de las que los círculos se niegan a desaparecer pese a su poca actividad, es en las localidades del interior de la comarca donde el partido continúa teniendo problemas para implantarse, probablemente, debido a la fuerza que en solitario ya tienen formaciones como Compromís, por su carácter nacionalista.

Elda

En el único municipio en el que parece que la situación de Podemos presenta un escenario estable es en Elda. En esta localidad, la formación cuenta con un asesor en el grupo municipal de Elda para Todas, nombre que adoptó la confluencia de Compromís, Izquierda Unida y Podemos para las elecciones municipales de 2023, en las que obtuvo dos concejales que actualmente forman parte del equipo de gobierno, Iñaki Pérez (IU) y Cristina Rodríguez (Compromís).

Desde la formación en la localidad destacan que la incentivación de la participación y el trabajo municipal han sido fundamentales para mantener una situación bastante favorable, con una presencia de unos 40 militantes. En Elda la formación morada se caracteriza por una organización estable, con una dirección del consejo ciudadano municipal encabezada por Marisa Ibáñez, quien asume el papel de portavoz y que cuenta con una dirección formada por cuatro personas.