Cambio de Gobierno, cambio de caras. Ana López Ferriz (Zaragoza, 1977) asume la dirección del Instituto Aragonés de Empleo (Inaem) en el mejor momento del mercado laboral aragonés desde 2008 opacado por un serio desajuste que ha llevado a las organizaciones empresariales a poner el grito en el cielo porque no hay manos para tanto trabajo. De suturar esa brecha entre oferta y demanda debe encargarse López, licenciada en Derecho y veterana de las relaciones empresariales (llega desde la CEOE Aragón, donde ha trabajado los últimos 20 años) que quiere poner el nombre del Inaem en boca de todo el mundo. 

Tiene Aragón una tasa de paro del 7,8% mientras la CEOE cifra en 25.000 las vacantes disponibles. ¿Qué está pasando?

El principal reto que tenemos es analizar y solventar esos desajustes entre oferta y demanda porque obedece a causas muy diversas. Tenemos 53.000 parados, que son 5.000 menos que el año pasado, pero me preocupan especialmente los niveles formativos: un 50% de los parados tiene solo la educación secundaria. Queda mucho por hacer. 

Ponen el centro en los oficios tradicionales: construcción, hostelería, transporte… 

Es muy importante la labor pedagógica y de sensibilización en la etapa educativa. Debemos prestigiar la Formación Profesional Dual en Aragón, que el año pasado se incrementó un 23% en la comunidad con 245 empresas más. Es clave la alternancia entre formación y trabajo, pero es cierto que debemos seguir impulsándola. 

Se lleva ya unos años hablando de la FP y una aragonesa, Pilar Alegría, dirige el Ministerio de Educación. ¿Se están dando los pasos en la dirección adecuada? 

Es evidente que hasta ahora esos pasos son insuficientes. En lo que respecta a Aragón, flexibilizaremos lo máximo posible los itinerarios de FP dual y adaptaremos todo lo que haga falta trabajando en la Estrategia de Formación Profesional. Es la formación que necesitan las empresas.

¿Es la FP también la solución a esos nuevos empleos que van a generar las multimillonarias inversiones en el ámbito informático y de los datos?

Y más con el momento dulce que vive Aragón, con la posibilidad de convertirse en un hub tecnológico. Creo que hace falta personal en todos los sectores con distintos grados de cualificación. A veces, con una formación más básica pero especializada no hace falta un título superior. Eso sí, es súper importante acreditar la experiencia y certificar las capacidades. Para ello, la orientación en los colegios, institutos y nuestras oficinas es básica para casar la oferta y la demanda. 

¿Cree que una solución es traer contingentes de trabajadores extranjeros?

Nosotros vamos a trabajar con el mercado laboral de Aragón. Nuestra prioridad es que los demandantes de empleo se formen, se recualifiquen y encuentren un empleo a su medida, del mismo modo que ayudaremos a las empresas a encontrar a los trabajadores que necesitan prioritatiamente entre nuestros demandantes de empleo. Deben ser las patronales y los sindicatos los que debatan si hay que explorar otras vías de contratación como traer contingentes. Nuestro objetivo es que los trabajadores aragoneses salgan de las listas de desempleo.

El paro juvenil sigue en torno al 25%. ¿Qué les pasa a los jóvenes?

El mayor descenso del paro se ha producido en el colectivo de los menores de 35 años y ahora estamos en 13.900. Hemos intentado acercarnos a los jóvenes empezando a trabajar con LinkedIn y renovando los convenios con Universa y vamos a poner en marcha un programa de escuelas de segunda oportunidad. Pero sí: nuestro empeño va a estar en el retorno del talento joven a la comunidad y en afianzar el que ya está aquí.

¿Cree usted que hay gente en el paro que no quiere trabajar?

No podemos entrar en las causas o motivos por los que una persona rechaza una oferta de trabajo. Sí que creemos que el mercado laboral, como todo mercado, se basa en la oferta y la demanda, por lo que las disfunciones se producen por causas muy diversas. 

«Es evidente que los pasos dados hasta ahora en FP son insuficientes. Hay que ir más allá»

El Gobierno de Pedro Sánchez ha tomado varias decisiones para cambiar el mundo del empleo, desde la reforma laboral a las sucesivas subidas del SMI o la reflexión sobre la jornada de cuatro días a la semana. ¿Coincide con las voces contrarias que vaticinan un frenazo del mercado laboral?

Todo lo que sea trabajar menos días y menos horas supone mayores costes para la empresa. Nosotros lo único que creemos es que debemos ser competitivos y tener los costes lo más racionalizados posible, pero nuestro trabajo se basa en establecer las medidas que faciliten que las empresas y los trabajadores ajusten sus necesidades mutuamente. El resto de debates les corresponde a otras direcciones generales. 

¿Por qué se produjo un solapamiento en la convocatoria pública para los profesores de las escuelas taller que dejó sin profesores a algunos centros como el de Veruela?

No fue a causa del Inaem. La convocatoria para este año fue publicada en mayo de 2023, así que lo desconozco porque no estaba en el cargo todavía. Es cierto que hubo un solapamiento de un mes y medio en algunos proyectos y hubo casos en que los profesores decidieron cambiar de proyecto para el año 2024. Nosotros financiamos los programas experienciales a los que concurren distintas entidades y es la propia entidad la que contrata al director y los profesores. No podemos de ninguna de las maneras interferir en la voluntad de un trabajador que decide cambiarse de proyecto, empresa o entidad, pero es algo que ya hemos solucionado con la DPZ, que era la entidad contratante.