El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha instado este viernes a Junts a reclamar conjuntamente en la mesa de diálogo con el Estado un referéndum de independencia, ahora que ambas formaciones están «dentro del carril de la negociación».
En una entrevista en Lleida TV, Aragonès ha subrayado que la resolución del «conflicto político con el Estado» y la defensa de un referéndum de independencia son cuestiones «muy importantes» para Cataluña que ERC y Junts deberían ser capaces de «defender conjuntamente» ante el Gobierno.
«Así lo he propuesto. No ha sido posible hasta ahora, no por falta de voluntad mía. Espero que ahora que todo el mundo está dentro del carril de la negociación, cada uno con su acento, con su propuesta, ahora es posible hacerlo», ha subrayado.
Aragonès ha enfatizado que este es un conflicto «entre Cataluña y España, no entre el Gobierno del PSOE y ERC o el Gobierno del PSOE y Junts».
El presidente catalán ha admitido que los desencuentros entre ambas formaciones durante los últimos años «pueden dificultar» el entendimiento para trabajar conjuntamente, pero ha instado a «construir las confianzas para que sea el país quien gane».
Críticas a la «manipulación» de algunos jueces
En plena tramitación de la ley de amnistía, también ha denunciado que «una determinada cúpula judicial» pueda «manipular» una ley que aprueba el Parlamento «por intereses políticos».
«Estamos en un debate que en cualquier democracia occidental chirriaría», ha dicho el presidente catalán, que ha considerado que habría que «rebelarse» y no dar esta cuestión «por hecha».
Aragonès ha enfatizado que la ley de amnistía es «muy sólida» y que lo será más con las enmiendas presentadas, y se ha mostrado convencido de que será avalada por el Tribunal Constitucional y la Justicia europea.
«El Congreso hará su trabajo y los jueces evidentemente tendrán que aplicar la ley, que es lo que les corresponde», ha agregado.
Preguntado sobre la desclasificación de los documentos sobre la intervención de su teléfono móvil con el programa Pegasus, el presidente catalán ha denunciado los «abusos de los poderes del Estado» y ha reclamado «llegar hasta el final» para saber por qué fue espiado y que esta situación no se repita.