Camille no consiguió convencer a Oriane de que Amaury no es quien dice ser, pero ha sembrado las dudas en su cabeza. La joven no se encuentra bien y no cree que sea normal, aunque no se esperaba que su marido fuese el culpable de su estado.
Al llegar a la cocina, la joven ha pillado in fraganti a Amaury, que le estaba metiendo algo sospechoso en el zumo. “¿Me estás drogando?”, le ha preguntado, atónita ante la pastilla que estaba machando su marido.
Tratando de esconderlo, Amaury ha fingido tranquilidad y le ha asegurado que no es lo que ella piensa. Sin embargo, Oriane tiene claro que ocurre algo y que puede que Camille tuviese razón. ¿Será este el punto de inflexión para que Oriane abra los ojos?