Cautela con el lujo. Es el consejo que dan los expertos de Jefferies a los inversores en su último informe sobre el sector, en el que se muestran tajantes al recortar sus estimaciones sobre la demanda y el beneficio por acción para este año. «Nuestra visión prudente sobre el lujo sigue vigente a principios de 2024», dicen.
¿Por qué? Estos analistas creen que sigue habiendo riesgos, como el de que 2024 sea «otro año de normalización en Estados Unidos», pero también mencionan la «continua debilidad en Europa» y la posibilidad de un «impulso limitado de los viajes» para elevar el gasto chino.
«Nuestra visión de crecimiento de la demanda de lujo para 2024 se ha reducido a la mitad, al 2,1%, frente al 6,7% del consenso», comentan los estrategas de la firma estadounidense, que explican que este cambio se basa en la rebaja en sus estimaciones sobre el aumento del gasto del grupo chino, que ha pasado del 13% al 6%.
Como señalan, «aceptamos un mayor lastre interno y una acumulación más limitada de la recuperación de los viajes» que también acabará por afectar al beneficio por acción del sector. «Las previsiones de BPA se han reducido en aproximadamente un 5,2%, lo que nos lleva a estar aproximadamente un 10,4% por debajo del consenso», remarcan.
Y con un escenario como este, dicen los analistas de la firma neoyorquina, es más crucial que nunca seleccionar con cuidado los valores del sector en los que invertir. «Richemont sigue siendo nuestra única compra y nuestra preferencia relativa», dicen.
«Nuestro recorte del 6% respecto a las estimaciones 24/25 de Richemont refleja una perspectiva de demanda más bajista, la dilución de los warrants y el ajuste al mercado por un franco suizo en alza. Seguimos opinando que la tracción relativa de la marca (aún saludable) y la sostenibilidad del margen son los aspectos más subestimados aquí (con un PER en 2025 de 15,7x, EV/EBIT de 11,0x)», apuntan.
Sobre LVMH, en Jefferies creen que sus resultados de 2023, que dará a conocer a finales de enero, podrían establecer un tono mixto para el sector. «Observamos una narrativa más prudente por parte del grupo sobre la desconexión entre el impulso de las ventas y el control de gastos operativos», indican. Creen también que las cifras de ventas de Richemont y Burberry, que darán a conocerse dentro de unos días, «ayudarán a establecer expectativas con cautela».
Por último, desde la firma estadounidense piden vigilar de cerca las oscilaciones del tipo de cambio. Recuerdan estos expertos que ya el pasado mes de septiembre advirtieron del «desafío adicional en materia de márgenes para la industria» que apreciaban a medida que se pasaba «de una fase de devaluación del euro a una fase de depreciación en algunas monedas clave del mercado final (JPY, CNY y KOW, sobre todo)».
«Por supuesto, el cambio en las expectativas sobre los tipos de interés es útil para las valoraciones del sector, pero si va acompañado de una venta masiva de dólares, conlleva obstáculos adicionales para el margen bruto y riesgos para el gasto en viajes en Estados Unidos en los próximos meses», lo que dejaría tocado al lujo, concluyen.