Solo le valía ganar a España. Era el todo o nada ante una Austria que buscaba el mismo premio, el pase a la Main Round, seguir vivo en el torneo. Pero esta vez la garra de los Hispanos no fue suficiente y acabaron cediendo un empate (33-33) que los dejaba fuera de la batalla. Tocará buscar la plaza para París 2024 en el preolímpico de marzo.
Había mucho en juego en el 40×20 del SAP Arena y eso quedó patente desde los primeros compases. Ya en la primera jugada Austria abrió el marcador con una asistencia en los seis metros a Wagner en el pivote. El azulgrana Aleix Gómez igualaba poco después desde los siete metros.
Zivkovic y Bilyk, una de las estrellas de la selección austríaca, ampliaban la renta pero de nuevo Aleix, tras un gran pase de Ian Tarrafeta recortaba distancias. Se atascaban ahí los Hispanos en ataque mientras seguían sumando los de Ales Pajovic y solo Tarrafeta daba movilidad a línea ofensiva española.
No sucedía lo mismo en el otro lado, en el que incluso en inferioridad numérica conseguían anotar. Un robo en una buena acción defensiva propició una contra que transformó Casado para poner el 7-7 en el marcador. Con el cambio al 5:1 con Alex Dujshebaev en el avanzado la selección de balonmano pareció mejorar, pero la doble exclusión de Viran Morros y Tarrafeta volvió a dar vida a los centroeuropeos, aunque la renta no superó el +2.
«Confianza en el trabajo defensivo para recuperar balones», pedía Ribera a los suyos cuando el +3 en el luminoso le obligó a pedir el primer tiempo muerto del partido. Le seguía faltando contundencia atrás a España pero las palabras del seleccionador sirivieron para imprimir una marcha más, metiendo piernas y potencia y el marcador volvió a equilibrarse.
Incluso llegó a haber varios minutos sin anotar pero una roja a Alex Dujshebaev propició el tanto en superioridad de Bilyk que rompía la igualdad (15-16) y añadía un problema extra a los Hispanos. Herbuger aún tuvo tiempo de hacer el último antes del descanso.
Más entonada arrancó España en la segunda mitad, con Tarrafeta manteniendo el nivel y Gonzalo Pérez de Vargas haciéndose fuerte bajo palos. Una mejora que propició que los Hispanos se pusieran por delante aunque con un margen escaso.
La victoria iba a estar cara y las diferencias eran nímias. Bilyk ponía a Austria por delante (26-27) y la serie de catastróficas desdichas se sucedían para Ribera con una nueva lesión. La de Agustín Casado, uno de los destacados del partido, que dejaba la pista cojeando, recordando los espisodios anteriores con Miguel Sánchez-Migallón y Kauldi Odriozola.
Crecidos con un Bilyk entonado, los austríacos tomaron una mínima renta que podía ser decisiva a falta de cinco minutos para el final. La red defensiva tejida por Ales Pajovic funcionaba pero la exclusión de Herburger la aprovecharon los Hispanos para poner el 31-31. Dos buenas intervenciones de Sergey Hernández propiciaron dos acciones peligros. Dani Dujshebaev no atinó en la primera, pero en la segunda, la contra lanzada por Aleix Gómez no la desaprovechó el otro Dani, Fernández.
Por si faltaba algo de épica, España dispuso de una nueva opción desde los siete metros que, Aleix transformó, dejando claro que ha vuelto su mejor versión. Con 20 segundos para el final Pajovic pidió tiempo muerto para preparar una jugada que acabó en gol. España estaba fuera. Corrió Aleix, su lanzamiento no entró pero aún quedaba una última jugada. Ribera sacó la pizarra. Solo había tiempo para un tiro. Se lo jugó Garciandia pero el balón se fue alto y la clasificación para la Main Round se esfumó.