EN OCASIONES, para evidenciar la capacidad que tenemos las personas de enfrentarnos a tareas para las que no hemos sido previamente adiestrados, muestro un texto en el que he cambiado algunas de las letras por otras elegidas al azar. Salvo que el texto original esté muy distorsionado, no tenemos mayor dificultad para identificarlo. El propio título de este artículo es un ejemplo que espero haya podido descifrar. ¿ERES CAPAZ DE LEER ESTE ARTÍCULO?, es el texto del que partí, cambiando casi todas las consonantes y alguna vocal.