Taylor Swift es la mujer del momento, un todoterreno que arrasa con todo. Ha tenido un 2023 estelar, probablemente la única persona con un mejor año que Pedro Sánchez. Lo atestigua la revista Time, que la alzaba como la persona del año, un reconocimiento que iba justificado con una larga lista de todos los hitos que ha cumplido en pocos meses, como, por ejemplo, el de ser la primera artista en posicionar tres álbumes en el top 10 de más vendidos durante más de 50 semanas consecutivas.
Sí, su música se pasea por las listas de éxitos con más soltura que Ana Obregón por la redacción de ‘Lecturas’, y sus fans (los ‘swifties’) se han convertido casi en un ‘lobby’: incluso lograron que se debatiera en el Congreso estadounidense sobre el monopolio de las empresas de espectáculos tras una serie de polémicas en la venta de entradas para la gira de la cantante. Su poder de autoorganización para encumbrar a su diosa es tal, que hay memes que aseguran que si se lo propusieran, lograrían hasta encontrar el submarino Titan. Quizá, incluso, podrían descifrar la misteriosa identidad del tal M.Rajoy.
Pero los ‘swifties’ no solo se organizan para misiones políticas, por supuesto. También para planes mucho más banales y entretenidos. Hay pequeñas comunidades por todo el globo y, obviamente, en España también. La comunidad nacional (@swiftieclubes, en redes) fue fundada en noviembre de 2022, y desde entonces no paran de organizar eventos para conectar a fans acérrimos de la cantante.
Los eventos son por toda la península (el próximo, en Madrid, el día 20), y de todo tipo. Por ejemplo, el último organizado en Barcelona fue en Pincelea (Buenaventura Muñoz, 31), una sesión de pintura y vino para celebrar el estreno del álbum ‘1998 (Taylor’s Version)’, un álbum con estética marítima, que se tradujo en más playas al óleo por metro cuadrado que en una galería de Sorolla. Hubo “pintura, buen rollo, vinito y ‘friendship bracelets’”, esas pulseras de cuentas y cuerdas que tan de moda están en TikTok. También «mucha música», según aseguran los organizadores y como atestiguan los TikToks que salieron de ahí. Seguro que más de un asistente llegó a casa sin voz.
¿Otros planes que han pasado por su agenda? Cerámica, pintura, bordados y hasta creación de velas. Una larga lista de planes dignos de ‘team building’ que siempre, siempre, siempre, llevan a Taylor Swift de hilo musical.