Camilo Sesto está entregado en cuerpo y alma a intentar sacar el musical de Jesucristo Superstar adelante. Desde que «sintió la llamada» en Londres, está convencido de que quiere traerlo a España. Una decisión muy trasgresora para la época franquista.

En el local de moda de la ciudad, se encuentra con el director de teatro, Jaime Azpilicueta y el productor y periodista, Nacho Artime, que además cuenta con los derechos de las canciones del musical. Durante este encuentro, Camilo intenta convencerles de sacar el proyecto adelante. Además, se ofrece a ser el protagonista de la obra y poner de su bolsillo ¡diez millones de pesetas!

A pesar de las dudas, los tres se ponen de acuerdo y deciden tirar hacia adelante: «¡Se acabó la España en blanco y negro!», exclaman muy emocionados ante esta decisión.