Mientras los clubes de Segunda queman sus Excels tratando de rascar euros para acometer los fichajes necesarios, muchos se asombran con el ritmo frenético del Oviedo en el mercado. El club azul ya ha cerrado dos fichajes (Dubasin y Borja Sánchez), ambiciosos desde el punto de vista económico, e irá a por un tercero. Fuentes cercanas al mercado sitúan en cerca de 800.000 euros el espacio que el Oviedo tiene para poder invertir en el presente mercado. Las llegadas de Dubasin y Borja se han llevado gran parte de la misma, pero aún queda margen para un tercer fichaje. La posibilidad de invertir tanto dinero responde a un mérito compartido entre varios actores de la entidad.
1. El ahorro del pasado verano
La primera clave para entender la holgura del Oviedo con su actual tope salarial responde a las buenas operaciones, económicamente hablando, del pasado verano. El club logró cuadrar los números para poder inscribir a todos sus futbolistas antes del cierre del mercado. Lo hizo, además, al margen de las dos últimas operaciones de salida, las que llevaron a Hugo Rama y Javi Mier a Deportivo de la Coruña y Huesca respectivamente.
En ambas salidas, el club tuvo que pagar una cantidad testimonial a los futbolistas, y a cambio se ahorró sus salarios. Es decir, la plantilla con Mier y Rama entraba dentro de los límites del tope, así que todo lo liberado de sus sueldos se convirtió en dinero a invertir en invierno. Esa cantidad que se quedó sin gastar se puede emplear ahora.
2. Un tope en aumento
El limite salarial (el techo de gasto que LaLiga impone a los clubes en previsión de sus ingresos y gastos) es un concepto vivo, que puede modificarse en cualquier momento. A finales de septiembre, la patronal cifró el gasto máximo del Oviedo en plantilla en 9,4 millones. Sin embargo, esa cifra ha ido en aumento.
La campaña de abonados, cerca del récord histórico, y las buenas cifras en cuanto a patrocinios y en las tiendas del club (con el «boom» Cazorla) han hecho que el tope se haya estirado estos últimos meses.
El funcionamiento para hacerlo es sencillo. LaLiga valora cada concepto (abonados, patrocinios, tiendas…) de forma estimativa, pero si los ingresos reales superan esa cifra, el tope se aumenta. Si el Oviedo firma un nuevo contrato de patrocinio después de septiembre de, por ejemplo, 25.000 euros, podrá certificarlo en cualquier momento ante la patronal y pedir que se le aumente el límite salarial. Lo mismo con los abonados, con una campaña que ha superado las mejores expectativas, con influjo directo en elevar el techo máximo de gasto. Esas mejoras conquistadas por diversos estamentos de la entidad hacen que el actual tope salarial del Oviedo sea más elevado que ese de 9,4 millones publicado el pasado septiembre.
3. Cláusulas de LaLiga activadas
Y, además, hay un tercer recurso, uno que ofrece LaLiga en determinadas circunstancias. Uno es el de los jugadores lesionados de larga duración. En ese caso, se puede emplear una parte porcentual de su sueldo para incrementar el tope. En el caso de Álex Millán, se activó el pasado verano. La segunda circunstancia, esta con influencia una vez iniciada la competición, es el del despido de un cuerpo técnico, como sucedió tras la sexta jornada con Cervera. En ese caso, LaLiga ofrece también la posibilidad de elevar el límite conforme a sus criterios, pero con una particularidad: el club puede emplear ese aumento de la forma que desee.
Un ejemplo con cifras orientativas: si LaLiga deja aumentar el límite en, por ejemplo, 300.000 euros y el nuevo cuerpo técnico tiene un coste de 250.000, ese club dispondrá de 50.000 euros para fichar si así lo desea. En este punto hay que añadir un matiz importante: ese incremento del tope, en el caso de que sea usado, se descuenta del límite de la temporada pasada. O sea, si el Oviedo usa las palancas ofrecidas por LaLiga por lesión y cambio de entrenador y agota el tope, el año que viene se le descontará la cifra de ambas operaciones.