Innumerables efectivos de Policía Nacional, Guardia Civil, seguridad del aeropuerto y emergencias esperaban a pie de pista para atender el aterrizaje de un jumbo 747 de Lufthansa, con destino Frankfurt, Alemania, que ha tenido que realizar un desvío en su ruta y detenerse en Palma para atender a una pasajera brasileña, de 57 años de edad, que presentaba parada cardiorrespiratoria.

El aterrizaje de emergencia llevado a cabo este miércoles no ha provocado, al parecer, ni cancelaciones, ni retrasos en los vuelos con salida y destino Palma. En cuanto al descomunal despliegue de seguridad, la Policía Nacional minimiza lo ocurrido y señala que se ha tratado de un operativo normal. Apunta que a las 9.15 recibía el aviso y se personaba en Son Sant Joan simplemente para identificar a la pasajera y controlar que todo el operativo se realizase con normalidad.

Cabe recordar que la magnitud del despliegue se produce más de dos años después del incidente ocurrido en Son Sant Joan. Fue en noviembre de 2021, cuando un avión procedente de Marruecos aterrizaba de emergencia para atender la indisposición de uno de sus pasajeros, con el resultado de que un total de 22 migrantes corrieron pista a través y entraron de forma ilegal en el país, puesto que su destino era Turquía.