César Alierta, expresidente de Telefónica y de Tabacalera, sigue vivo, aunque su estado de salud es muy graves. Así lo han confirmado a El Independiente fuentes cercanas al empresario tras difundirse la noticia de su muerte a través de dos agencias de información.
Alierta, que ha sido una de las figuras más importantes en las últimas décadas del siglo XX, se encuentra ingresado en estado muy grave en una clínica de Zaragoza, a causa de la complicación de una dolencia cardiaca que arrastra, según informa El Heraldo. Desde hace varios años, el aragonés ha arrastrado graves problemas de salud que le han llevado a permanecer varios meses ingresados en hospitales.
El empresario estuvo en Telefónica un total de 16 años. Tras culminar varias operaciones y llevar a la operadora a máximos históricos en bolsa dejó al frente a José María Álvarez-Pallete. Como muestra del trabajo realizado, el consejo de administración le nombró presidente de la Fundación Telefónica.
Antes presidió Tabacalera entre 1996 y 2000 y lideró el proyecto de fusión con Altadis. La compañía pasó a ser privada ya que pertenecía al Estado. En dicha etapa, el empresario tuvo que hacer frente a un daño reputacional puesto que la Audiencia de Madrid sostuvo que obtuvo información privilegiada él y su sobrino. No obstante, el caso se resolvió con ambos absueltos.
César Alierta fue también accionista del Real Zaragoza junto a su familia. El empresario logró el control del club a través de la Fundación 2032, junto a la familia De Yarza, propietaria del grupo de comunicación Henneo y matriz del periódico El Heraldo de Aragón.
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