La economía mundial encara 2024 entre temores de desaceleración y/o recesión. Los estrategas debaten entre si el endurecimiento monetario llevado a cabo por los bancos centrales desembocará en un «aterrizaje suave» o «forzoso» de la economía. A este respecto, el último en pronunciarse ha sido Peter Oppenheimer, jefe de investigación macroeconómica en Europa de Goldman Sachs, quien cree que el mundo se acerca a «un nuevo súper ciclo» de crecimiento.
«Nos estamos moviendo claramente hacia un súper ciclo diferente«, ha señalado en el programa ‘Squawk Box Europe’ de CNBC.
Por «súper ciclo» se entiende largos periodos de expansión económica, a menudo acompañados de un crecimiento del PIB, una fuerte demanda de bienes que conduce a precios más altos y altos niveles de empleo.
Para el experto, si bien los desarrollos económicos actuales teóricamente deberían llevar a un descenso del ritmo de los rendimientos financieros, hay fuerzas que podrían tener un impacto positivo, como por ejemplo, la inteligencia artificial (IA) y la descarbonización.
La IA aún se encuentra en sus primeras etapas, sin embargo, a medida que se utiliza cada vez más como base para nuevos productos y servicios, podría tener un «efecto positivo» para las acciones, según estima Oppenheimer.
«Lo segundo es que aún no hemos visto, y creo que estamos relativamente seguros de que veremos, es una mejora en la productividad gracias a las aplicaciones de IA que podría ser positiva para el crecimiento y, por supuesto, para los márgenes», ha añadido.
En este sentido, y a pesar de que la IA y la descarbonización son conceptos relativamente nuevos, para el analista existen paralelismos históricos entre ambos. Uno de los periodos históricos que ha destacado es el de principios de la década de 1970 y principios de la de 1980, que «no eran tan diferentes» a los desarrollos actuales.
«La inflación elevada y los tipos de interés eran quizás problemas más estructurales que ahora», ha subrayado, sin embargo, «factores como las crecientes tensiones geopolíticas, el aumento de los impuestos y la mejora de la regulación parecen similares».
«Debido a este tremendo shock doble que es probable que veamos, un shock positivo de innovación tecnológica a un ritmo muy rápido junto con la reestructuración de las economías para avanzar hacia la descarbonización, creo que es un período que es más parecido a lo que vimos a finales de 2019″, ha agregado.
Por ello, ha destacado que estos paralelismos históricos pueden ser tomados en cuenta como lecciones para el futuro.
«Mirando hacia atrás en el tiempo, los ciclos y las rupturas estructurales se repiten, pero nunca exactamente de la misma manera. Y creo que tenemos que aprender de la historia cuáles son las inferencias que podemos tener en cuenta para posicionarnos mejor para el tipo de entorno en el que nos estamos moviendo«, ha concluido.