Dani Martínez, antes de comenzar el encuentro ante el Barcelona.
EFE / JAVIER CEBOLLADA

El entrenador de la UD Barbastro, Dani Martínez, acabó satisfecho del partido y en particular de la segunda parte del equipo del Somontano y así lo reflejó tras el encuentro. “Durante la charla del descanso les he dicho que se quitaran ese temor, el miedo, que había que creer y insistir. Hemos hecho un buen partido y tenemos que estar orgullosos de ello”, aseguró el preparador del cuadro altoaragonés, que habló de la fiesta vivida en el Municipal. “Yo creo que han sido tres sueños, el primero contra la Ponferradina, que para nosotros fue un gran día, qué decir del partido del Almería, eliminar a un Primera fue un día histórico para Barbastro. Esto ha sido un colofón. Estoy orgulloso de la imagen que ha dado el equipo en todo momento. Esto va a ser un día para el recuerdo de todos”, reflejó.

Sobre el partido en sí, el entrenador reconoció que les costó entrar en él en la primera parte, ya que era “la primera vez para todos mis jugadores de poder jugar ante 6.000 personas, en la primera parte ellos han estado a buen nivel, al descanso tenía que haber sido un marcador más amplio. En la segunda parte creo que el equipo ha creído. Hemos podido acortar distancias en un balón parado, pero hemos recibido el 1-3 de penalti y hemos insistido y hemos podido recortar y creer”, explicó el preparador del conjunto barbastrense, que no ocultó la satisfacción vivida al terminar el encuentro: “Se respiraba felicidad en el vestuario por la segunda parte que hemos hecho independientemente de la primera. Mis jugadores han hecho lo posible para hacer sufrir al Barcelona. Estamos muy contentos y felices. La entrega máxima es lo mínimo que podíamos darle a la afición. Ver a tanta gente feliz y darlo todo”.

Finalmente, Dani Martínez quiso ver el encuentro como una enseñanza, porque “si trabajas y los resultados salen es algo extraordinario el partido que hemos hecho. El Barça se ha confiado con el 0-2 y lo hemos aprovechado. Presionábamos bien, con balón estábamos más fluidos. El fútbol siempre son estados de ánimo. Esto nos tiene que servir para que el equipo mantenga su fe en el trabajo, algo que ha hecho desde nuestra llegada”.