«Estoy increíblemente feliz de tenerle de vuelta». La frase de Pep Guardiola sobre el regreso de Kevin De Bruyne al término del partido ante el Huddersfield hacía evidente el aprecio del técnico hacia el belga. 149 días echando de menos a un jugador completamente diferente, desde que aquel fatídico 11 de agosto el centrocampista sufriera una lesión muscular a los 20 minutos del duelo ante el Burnley.
El belga volvió a entrenar con sus compañeros a principios de diciembre y regresó a la competición el pasado domingo, dando una asistencia a Doku para completar la ‘manita’ e ilusionando a toda la afición ‘sky blue’. «A Kevin le toca estar tranquilo, jugar minutos… No hay que obligarle», añadía Guardiola en rueda de prensa. «No le pido que esté a su nivel. Lo demás ya vendrá. En 20 minutos puede ayudarnos más que en 90. Después, su cuerpo dictará sentencia».
El City ha echado mucho de menos a De Bruyne en los últimos meses. A pesar de que Julián Álvarez ocupó ese rol dejando un rendimiento espectacular, la realidad es que no existe un futbolista como el ex del Wolfsburgo en el equipo de Manchester y Pep lo sabe. «La afición está enamorada de él. Y ese respeto será para siempre. Necesita acumular entrenamientos e incluso partidos. Kevin te ayuda a ganar partidos con su talento, pero no vamos a presionarle. No sería justo con él», afirmó el técnico.
Un jugador único
«Tiene una cualidad especial que es difícil de encontrar. Tenemos a jugadores como Haaland, Doku, Nunes, Bobb… a los que les encanta correr y llegar desde segunda línea y De Bruyne es excepcional dando esos pases», explicaba Guardiola. Son precisamente esos envíos y su mentalidad vertical cada vez que recibe el balón lo que hacen diferente al belga, lo que le convierten en un jugador único.
Ya sea con pases filtrados a la espalda de la defensa para las carreras de Haaland o con esa comba especial que pone en sus centros cuando decide caer a banda, dibujando parábolas que parecen imposibles, De Bruyne siempre es determinante y acerca a su equipo a la victoria. Por no hablar de su capacidad para dirigir contraataques. El City y Pep ya tienen de vuelta a su ‘fichaje’ de invierno.