Es el jugador de moda en el Valencia CF y su impacto en el equipo ha reventado las expectativas tras su fichaje. Aunque no es el único nombre propio de la temporada en un once con una identidad de juego y una estructura con las piezas clave muy definidas, Pepelu compra papeletas en cada partido para terminar el curso como una de las sensaciones de toda la Primera División.

El joven centrocampista fue la gran apuesta – económica y deportiva- en el mercado de fichajes del pasado verano. El Pipo tenía claro qué perfil necesitaba para convertirse en la piedra angular del equipo. Una posición ávida de un futbolista con la serenidad y el vuelo suficiente para sostener y aportar en ambos campos. Un papel fundamental en la cabeza de un técnico, que conoce a la maravilla lo que debe ser la sala de máquinas del Valencia CF.

Pepelu ha asumido a la perfección su rol y no solo eso, lo ha hecho con una naturalidad pasmosa. Sus grandes actuaciones no son flor de un día. Los datos arrojan que su influencia en el equipo es total: Segundo en goles, primero en pases precisos (82%), en pases clave y en balones largos. Hasta en aspectos defensivos aparece su nombre entre los más destacados. De hecho según datos estadísticos de SofaScore, Pepelu es el mejor jugador del equipo en valoración (7’28).

Su guante da puntos

Solo Jorgensen evitó que el inicio de 2024 fuese cum laude para Pepelu. El de Denia firmó un doblete en Mestalla para cerrar la victoria frente al Villarreal con otra actuación destacada. Solo el meta groguet evitó un triplete que hubiera supuesto un broche maravilloso a una noche mágica. Pepelu empieza el año con su mejor versión y protagonizando la transformación que ha sufrido el equipo desde la llegada de Rubén Baraja al banquillo.

El mediocentro se ha convertido en una preciada arma para el entrenador vallisoletano con su excelente golpeo en el balón parado. Todavía no ha podido estrenarse con un gol de falta directa, pero su 4 de 4 desde el punto de penalti ya han dado nueve puntos. Una cifra nada desdeñable y a la altura de los mejores goleadores del campeonato. Asimismo disponer de un lanzador con ese nivel de acierto se antoja fundamental en una temporada en la que los resultados son tan cortos.

El complemento ideal

El arranque de curso del equipo fue espectacular. Desde entonces el ‘18’ solo ha hecho más que crecer, además dando al Pipo Baraja la tranquilidad de que dar siempre un rendimiento alto conjugando con cualquiera en el campo; ya sea Javi Guerra, Hugo Guillamón, Mouctar Diakhaby, André Almeida o Selim Amallah.

A priori Baraja arrancaba con una dupla formada por Diakhaby y Pepelu como timón en la medular, dando libertad a Almeida y a Guerra el papel de revulsivo en ese momento del verano.

Con el paso de los partidos, el canterano y Pepelu se convirtieron en la pareja titular en un momento en el que el Valencia estaba de dulce. Ahora, en el último tramo de Liga, Baraja ha apostado por acompañar a Pepelu con Guillamón, transformándose en dos victorias (Rayo y Villarreal) y un empate frente al Barcelona para un 7 de 9. Aunque todavía ese pronto, puesto que la próxima lista será en marzo, Pepelu puede empezar a estar atento a una llamada de De La Fuente.