La alcaldesa saliente de Pamplona, Cristina Ibarrola (UPN), ha señalado tras la moción de censura que «nunca sería alcaldesa con los votos de EH Bildu» y que antes que eso «prefiero fregar escaleras». Estas palabras han causado un gran revuelo y ha sido acusada por varios dirigentes políticos de «clasista». A pesar de ello, Ibarrola no ha pedido perdón y se ha limitado a precisar sus palabras.

En declaraciones a los medios tras la aprobación de la moción de censura que ha dado la Alcaldía a EH Bildu, con el apoyo de PSN, Geroa Bai y Contigo-Zurekin, Ibarrola dijo que ella «jamás, pasase lo que pasase» sería alcaldesa con los votos de EH Bildu. «Prefiero fregar escaleras», ha zanjado.

Horas después, y a través de las redes sociales Ibarrola ha matizado sus palabras, aunque sin pedir disculpas. «Es evidente que lo que he querido decir es que prefiero realizar un trabajo digno, duro y mal pagado como el de la limpieza, a vender mis principios y ganar 100.000 euros en un sillón pactando con Bildu de forma indigna. Cualquier otra interpretación es falsa, interesada y partidista«, concluyó.

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«Es clasismo y machismo»

Estas declaraciones de Ibarrola han tenido respuesta por parte de diversos grupos políticos. Uno de los primeros en arremeter contra ella fue el PSOE. «Nosotros preferimos no ser unos clasistas», apuntan desde la cuenta oficial X del partido. 

La líder de Sumar y vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, ha señalado que «las mujeres que limpian escaleras desempeñan una tarea social fundamental y su trabajo debe ser pagado y reconocido». «Una razón más para la moción de censura en Pamplona», ha opinado.

Misma línea ha mantenido la exministra y dirigente de Podemos, Irene Montero, que apunta que «si no se friegan escaleras, se para el mundo». «Es clasismo y es machismo que olvida que las tareas de cuidados, realizadas mayoritariamente por las mujeres, sostienen la vida», ha afirmado para, acto seguido, dar su enhorabuena a los vecinos de Pamplona por el cambio político en la Alcaldía.