El Atlético Saguntino ha vivido un año 2023 de notable en el aspecto deportivo tras lograr la permanencia en Segunda Federación y llegar al actual parón navideño fuera de las posiciones de descenso.
Sin embargo, la trayectoria deportiva del equipo que entrena Sergi Escobar ha quedado empañada por las durísimas sanciones impuestas al club por el Comité de Competición tras lo ocurrido en el último encuentro del grupo 3 de Segunda Federación en Alzira.
Con cuatro y dos años de inhabilitación a los directivos Rubén López Vieco y Fran Llorens Monzonis, así como otras de cuatro meses al fisioterapeuta Tomás Ribera más una multa de 6.001 euros al club, la Navidad está resultando amarga en el Atlético Saguntino.
Los hechos descritos en el acta arbitral del partido disputado en el Luis Suñer Picó de Alzira, en la que se acusaba a los dirigentes del Atlético Saguntino de proferir insultos racistas, xenófobos y homófobos contra el árbitro y sus asistentes, ha provocado la aplicación del Código Disciplinario de la RFEF de forma implacable.
Pese a que el Atlético Saguntino ha recurrido las sanciones a Apelación y, llegado el caso, a la justicia ordinaria, el daño a la imagen del club ya está hecho y, al final, eso es lo que ha quedado de un año en el que se han cumplido los objetivos en el aspecto deportivo.
Porque desde que Sergi Escobar se hizo cargo del Atlético Saguntino en el pasado mes de enero tras la destitución de Gerard Albaladejo, el equipo romano protagonizó una gran remontada en la segunda vuelta de la temporada anterior, pasando de puestos de descenso a rozar las posiciones de promoción de ascenso y Copa del Rey.
En la temporada actual, el Saguntino ha llegado al final de este año fuera de las posiciones de descenso que ha ocupado tras un irregular primer tercio de campeonato marcado por el «exilio» en el campo de El Fornás mientras se prolongaron las obras de reforma del Nou Camp de Morvedre.
Por último, el final de año del Atlético Saguntino también ha estado marcado por la decisión tomada por Juan Manuel Domingo de dejar la presidencia del club después de más de una década en el cargo. En la actualidad, una junta gestora lleva las riendas de la entidad.