Los Boston Celtics repitieron victoria en su gira por el Oeste y, tras imponerse en Sacramento por 25 puntos, este sábado lo hicieron también en Los Ángeles por 108-145, humillación clara a unos Clippers incapaces de reaccionar.
Jayson Tatum fue el líder en la pista con 30 puntos anotados, aportando 5 triples de 10 intentos, más 5 rebotes. No necesitó de minutos en el último cuarto, pudiendo descansar de cara al choque del lunes en la jornada especial de Navidad ante Los Angeles Lakers.
Junto a Tatum, sumaron en dobles dígitos también Jaylen Brown con 24 puntos, Jrue Holiday con 20 y Derrick White con 18. Los Celtics, líderes del Este con un balance de 22-6, lanzaron 53 triples y anotaron 25, igualando la tercera mejor marca de su historia.
En los Clippers (17-12) fue una tarde muy decepcionante, cayendo de nuevo aplastados después de haberlo hecho el pasado jueves por 19 puntos ante los Oklahoma City Thunder en un encuentro que cortó su gran racha de nueve triunfos seguidos.
Frente a los Celtics, la única estrella que dio la cara fue Paul George con 21 puntos. Ivica Zubac salvó los muebles en determinados momentos y terminó firmando 16 puntos y 10 rebotes.
Los Clippers no pudieron contar con Kawhi Leonard por segundo partido consecutivo -ambos terminaron en derrota-, mientras que los Celtics tampoco pudieron hacerlo con Kristaps Porzingis.
Recital de Boston
Los Celtics quisieron mostrar rápidamente que la gira por el Oeste les importa mucho y que la exigencia a la que iban a poner a los Clippers sería máxima. Era una buena manera de comprobar en qué punto se sitúan los angelinos de cara a sus aspiraciones.
El duelo se personalizó de inicio en un cara a cara entre Tatum y George, que terminaron el primer periodo con 10 y 12 puntos, respectivamente. Las segundas oportunidades lanzaron en el luminoso a los Celtics, así como los tantos en la pintura (10 en total para los visitantes).
El triple también comenzó a dictaminar la dirección de ambos equipos, mucho más inspirados los de Joe Mazzulla con el doble de anotaciones desde el perímetro que su rival. Se cerró el primer periodo con 21-28 para los Celtics.
Tatum mantuvo ese idilio con los triples, sumando tres más sin fallo en el segundo cuarto, y consolidándose como máximo anotador del encuentro. El último de ellos fue además un tres más uno en el que dio el susto al caer y torcerse el tobillo, pero afortunadamente pudo continuar con normalidad.
Zubac fue de lo poco destacable en los locales, fajándose bajo el aro y capturando hasta 5 rebotes ofensivos, 4 de ellos en el segundo periodo, y sumando 8 puntos en ese tramo de juego.
James Harden trató de hacer la guerra por su cuenta y logró mantener por momentos a su equipo, cortando el despegue de los Celtics en el tanteo. Con sus 10 puntos antes del descanso, maquilló algo el 51-68 con el que ambos grupos se marchaban al vestuario.
La seriedad de Boston se mantuvo con la reanudación así como la impotencia de los Clippers a la hora de frenarles en defensa. Nunca encontraron soluciones y esto se tradujo en una nueva máxima de 25 puntos (53-78) en tiempo récord, tras apenas dos minutos de juego, con un nuevo parcial de 2-10.
Las caras y el lenguaje corporal de los angelinos hablaban por sí solos: se dejaron ir en el choque y aceptaron que los Celtics les estaban pasando por encima. Llegó a haber 35 puntos de renta (71-106) y el objetivo para los Clippers comenzaba a ser ya el evitar un resultado demasiado sonrojante.
Con la única duda de saber por cuánto se impondrían los Celtics, culminó Boston el tercer cuarto mandando con un contundente 81-106. Ni el parcial de cierre de 10-0 de los locales invitó al optimismo en el Crypto.com Arena.
Con todo decidido, ni Tatum ni Holiday pisaron la cancha en el último cuarto y poco tardaron el resto de figuras del Boston en irse al banquillo pensando ya en el mediático choque del lunes ante los Lakers.
Con el definitivo 108-145 se confirmó la peor actuación del año para los Clippers, además ante su público, encajando más puntos que nunca y sucumbiendo por 37 tantos, su derrota más abultada en lo que va de temporada.