A pesar de que ya se han subido a este escenario muchas veces, los talents de La Voz: All Stars no podían evitar sentirse nerviosos ante unas nuevas Audiciones.
Curricé, un talent consolidado que llegó hasta la final de La Voz 2020, tenía los pelos de punta antes de su actuación, aunque se sintió muy bien acompañado por la energía que le transmitía su hermana, sus amigos y su novia desde el backstage.
Llegaba el momento de la verdad, del todo o nada cuando Curricé nos confesaba que tenía una “espinita” clavada desde sus antiguas Audiciones a ciegas. “Pablo López fue el único que no se giró”, comenta el talent sobre una edición en la que estuvieron Alejandro Sanz, Antonio Orozco, Laura Pausini y el propio Pablo López.
Pero el mismo talent se daba ánimos de que, aunque no se girara Pablo o ninguno de los coaches, había que seguir, “porque hasta el último segundo se pueden girar”. Aunque Curricé no tuvo que esperar mucho. De hecho, tardó 43 segundos en superar las Audiciones a ciegas de La Voz: All Stars… ¡cuando Pablo López se giró! Así, en menos de un minuto, se quitó una espinita que tenía desde hacía tres largos años.
En los últimos segundos de actuación, Orozco y Fonsi también pulsarían su botón, y es que el puertorriqueño sufrió más adelante el superbloqueo de Pablo López cuando quiso sumar a Curricé para su equipo.