Hacinamiento, colchones en el suelo, drama y caos. Los Juzgados de Instrucción número 6, 19 y 20 de Madrid solicitaron este viernes al Ministerio del Interior que adoptase, «con carácter urgente, cuantas medidas resulten precisas» para solucionar la situación de los inmigrantes en las llamadas salas de inadmitidos de las terminales T1 y T4 del Aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas.
Madrid Total, la sección local de EL ESPAÑOL, ha tenido acceso en exclusiva a varias imágenes tomadas en el interior de dichas instalaciones. Concretamente, en la Terminal 1. Las fotografías en posesión de este periódico demuestran, como alertaron los jueces, que también hay menores de edad en dichas salas, además de una sobreocupación de las mismas.
Los Juzgados de Instrucción número 6, 19 y 20 son los encargados de supervisar los CIE (Centros de Internamiento de Extranjeros) de la Comunidad de Madrid y las Salas de Inadmitidos, donde los inmigrantes rechazados en la frontera son atendidos por los servicios sociales.
Imagen de una sala de inadmitidos en el Aeropuerto de Barajas.
De forma unánime, los jueces Adelaida Medrano, Inmaculada Iglesias y Pedro Javier Merchante también ordenaron a la Comisaría General de Extranjería y Fronteras que tomara medidas contra esta situación de «hacinamiento», provocada por el exceso de solicitantes de asilo, enviados a dichos recintos antes de ser expulsados de España. Gran parte de los migrantes son venezolanos y nigerianos.
En todo 2022, un total de 767 personas solicitaron asilo. Sólo entre agosto y noviembre de 2023, la cifra se eleva a 1.357.
La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) fue la que alertó de esta situación. En un comunicado, exponía que, en el verano de 2023, se ha producido un aumento exponencial del número de solicitudes de asilo o protección internacional.
Además, la CEAR alertó de «retrasos» en los trámites burocráticos para formalizar las peticiones, lo que ha culminado en la «sobreocupación» de la Sala de Inadmitidos de la T1, que, debido a este problema, también se ha acabado usando para solicitantes de asilo. Por ello, el Ministerio del Interior habilitó la de la T4.
Según reprochó la Comisión Española de Ayuda el Refugiado, este viernes, el recinto acogía a 250 personas, una cifra superior a la capacidad prevista, «con el consiguiente deterioro de las condiciones higiénicas de las instalaciones y escasez de comida».
La situación era tan extrema que los jueces encargados del control de estas salas las visitaron y comprobaron que algunos migrantes dormían en colchones instalados en el suelo, «sin las más mínimas condiciones de salubridad, higiene e intimidad». Algunos, además, lo hacen acompañados de sus familias, en las que hay menores de edad.
En una resolución fechada este viernes, los tres Juzgados precisaron que, en esa fecha, había 166 solicitantes de asilo en la T1. De ellos, 17 son menores de edad. En la T4 hay 75 migrantes, de los que dos son menores y viajan a cargo de sus progenitores.
La sobreocupación es evidente. La Sala de Asilo de la Terminal 1 contempla un aforo máximo de 44 personas y la Sala de Inadmitidos, de 28. En el caso de la Terminal 4, las cifras son de 34 y 50, respectivamente.
La Policía ya ha comunicado a los Juzgados que trabaja para solucionar la situación «a la mayor brevedad posible». Por su parte, el Ministerio del Interior informó este viernes de que habilitará «más espacio» para atender a estas personas, como una «medida coyuntural» mientras resuelve el problema.
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