El Nápoles vive una temporada muy distinta a la pasada, que acabó con el logro histórico de ganar el primer ‘scudetto’ post Diego Armando Maradona, tras 33 años de sequía. El club partenopeo, próximo rival de un FC Barcelona que tampoco está en los niveles de rendimiento que demostró el curso pasado al reconquistar la Liga, consumó el pasado martes una humillante eliminación en la Coppa italiana en su propio estadio ante el Frosinone (0-4), lo que ha abierto la caja de los truenos.

Quinto en la tabla de la Serie A con 27 puntos en 16 jornadas, a 14 puntos del líder, el Inter de Milán, el entrenador del Nápoles, Walter Mazzarri, también cargó de puertas adentro del vestuario como horas después hizo su colega azulgrana Xavi Hernández por  sufrir lo indecible para vencer a uno de los peores colistas ligueros de la historia, el Almería (3-2). Frases como «algo tendré que hacer» o «que se vayan los que quieran irse» en el inminente mercado invernal confirman que el ambiente en el Nápoles está  enrarecido. 

«Pido perdón a la afición por lo sucedido ante el Frosinone, pero esto no es el final de la sociedad. Lo que tenemos que hacer ahora es mirarnos unos a otros y cambiar nuestro enfoque para reaccionar», señaló el entrenador.

Los rumores apuntan a una posible salida de jugadores como Diego Demme, Elif Elmas o Gianluca Gaetano, y habrá que ver si la lista se amplía. Hay indicios evidentes de malestar en las más altas instancias del club. Mazzarri explicó que el presidente del Nápoles, Aurelio De Laurentiis entró en el vestuario antes de que acabara el partido para esperar a los futbolistas. 

Los números de sus estrellas no están en los niveles del pasado curso Khvicha Kvaratskhelia (5 goles y 5 asistencias) y Victor Oshimen (8 y 3), en un equipo que ya cambió de entrenador en noviembre. Rudi Garcia, que había relevado en verano al campeón Luciano Spalletti, cedió rápidamente su sitio al veterano Mazzarri (62 años), pero el equipo ha bajado desde ese cambio mediado noviembre en la clasificación de la Serie A, pasando del cuarto  lugar con un balance de 6 victorias, 3 empates y 3 derrotas al actual quinto puesto 8 victorias, 3 empates y 5 derrotas.

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Nápoles y Barça se enfrentarán el 21 de febrero de 2024 en el partido de ida de octavos de final de la Champions League en el estadio Diego Armando Maradona y el 12 de marzo, en la vuelta el estadio Olímpic Lluís Companys. 

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