La hemeroteca, ese almacén de contenidos que tantas malas pasadas puede jugar, ha tenido una nueva víctima: el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida. En concreto, por un tuit que escribió en 2019 a propósito de Manuela Carmena, su predecesora en el cargo, y que ahora, al ser recuperado por un tuitero, le deja en un muy mal lugar.

La cuenta de Twitter @MadridDecadente ha rescatado este tuit del primer edil de la capital, en el que afeaba que Carmena estuviera talando árboles y que no plantase nuevos en sustitución a los eliminados. Almeida, además, sostenía que quería un «Madrid limpio y verde» y que no hubiera «ni un solo alcorque sin su árbol». 

 

«Madre mía, que mal envejecen algunos tuits», escribía el usuario, en un post que se ha llenado de respuestas cargadas de indignación ante este mensaje de Almeida. Quien en su día afeaba la tala de árboles y argumentaba que quería traer de vuelta el Madrid verde protagoniza ahora eliminaciones masivas de espacios verdes y de ejemplares arborícolas, asfalta calles y alcorques y rige una ciudad con unos niveles de contaminación peligrosos para la salud humana.

Por su parte, numerosos colectivos vecinales llevan tiempo señalando las grandes talas que se están llevando a cabo en la ciudad de Madrid.

 

 

 

 

 

Arboricidio por las obras de la Línea 11 de Metro

En plena transición ecológica y ante un momento de crisis climática con difícil retorno, la Unión Europea y otras organizaciones internacionales claman por una aceleración de las medidas para combatir el cambio climático, como dotar a las ciudades de parques y arboledas. Algo de lo que Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez-Almeida no parecen tener especial intención, y de hecho, el pasado lunes dio comienzo una tala, por parte del Ejecutivo autonómico, de más de 500 árboles entre Comillas, en Carabanchel, y Madrid Río, en Arganzuela, siendo este último uno de los grandes pulmones verdes de la capital, con motivo de las reformas de la Línea 11 de Metro. Los espacios verdes son fundamentales en las grandes urbes, ya que los árboles cumplen una función esencial en la mitigación de los gases perjudiciales. Según la ONU, un árbol maduro puede absorber hasta 150kg de gases contaminantes al año.

A su vez, se trata de ejemplares longevos, con más de medio siglo de antigüedad. Vecinos que se echaban a la calle en el Paseo de Yeserías de Madrid, junto a activistas y distintas organizaciones ecologistas al grito de “metro sí pero no así” o “no a la tala” para intentar paralizar las obras han llegado incluso a encadenarse a las bases de los troncos para evitar el talado. La protesta se saldó con 3 detenidos por desacato a la autoridad.

La línea 11 de Metro, la más corta de toda la red madrileña, se encuentra en ampliación, y sus dos nuevas paradas subterráneas requieren llevar a cabo esta contundente deforestación. Desde el Gobierno autonómico se argumenta que no hay otra posibilidad, aunque los colectivos vecinales y la oposición han señalado que sí sería posible desplazar la estación fuera de Madrid Río y que ello evitaría la tala masiva de árboles.