La Fiscalía ha apoyado este jueves que se prohíba al grupo Mediaset la difusión de imágenes de Daniel Sancho en la prisión de Tailandia en la que permanece o de sus redes sociales sin su consentimiento, aunque se ha opuesto a que esa prohibición sea extensiva, en general, a imágenes o comentarios sobre su vida privada.
Así lo ha expuesto la fiscal ante la magistrada del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 56 de Madrid, que este jueves ha celebrado una vista sobre las medidas cautelares solicitadas por el padre de Daniel Sancho, Rodolfo Sancho, como paso previo a la interposición de una demanda.
El madrileño Daniel Sancho se declaró el pasado lunes no culpable del asesinato premeditado del cirujano colombiano Edwin Arrieta en agosto en Tailandia, durante una vista en el tribunal de la isla de Samui, aunque sí se declaró culpable de haber ocultado partes del cuerpo.
La familia de Sancho solicitó recientemente, «ante la constante divulgación en medios de comunicación de informaciones pertenecientes a la estricta intimidad» del acusado y «de noticias infundadas sobre su persona», que Mediaset no emita imágenes de su vida privada ni ningún comentario ofensivo sobre la misma, ni tampoco imágenes obtenidas sin permiso dentro de la cárcel o en redes sociales, como ha ocurrido en los últimos meses.
En la vista sobre la petición de medidas cautelares La Fiscalía se ha opuesto a la primera petición argumentando que es genérica, ya que no se precisa qué es un comentario ofensivo ni se acota el ámbito de la vida privada, pero sí se ha mostrado a favor de que no se difundan imágenes de Daniel Sancho obtenidas en el centro penitenciario o en sus redes sociales sin su consentimiento.
«Son imágenes totalmente ajenas al proceso«, ha dicho la fiscal del caso, que ha advertido no obstante a la Sala de que el letrado de la familia de Sancho no ha hecho el ofrecimiento de caución -similar a una fianza- que conllevan las peticiones de medidas cautelares, de manera que debe subsanar ese error, ya que de lo contrario entiende que el proceso no debe seguir adelante.
Por su parte el letrado de la familia de Sancho, Mario Bonacho, ha defendido que Mediaset ha difundido durante meses expresiones injuriosas sobre Daniel que afectan a su imagen pero que además tienen «un impacto directo en el ámbito internacional y se saben en Tailandia«, de manera que el acusado de asesinato puede enfrentarse al juicio «sin garantías procesales, sin derecho a una defensa digna».
Lee también
Ha defendido que no se exige a Mediaset que no hable del proceso penal, de manera periodística, sino de la vida privada Daniel Sancho, y que se trataría de unas medias cautelares solo hasta el fin del procedimiento, que de no tomarse darían pie al grupo periodístico «a seguir fisgonenado para apuntarse el tanto».
Por el contrario, el letrado de Mediaset se ha opuesto a esas medidas cautelares al entender que no se cumplen los requisitos y que no garantizan que se cumpla una posible futura sentencia condenatoria, y además chocan con otros derechos fundamentales como el derecho a la información, tratando de imponer «una censura previa».
Este letrado ha puesto de manifiesto que otros medios también han informado sobre aspectos de la vida privada de Daniel Sancho y han emitido imágenes de la cárcel, y ha incidido en que tanto el propio Daniel como su familia «pidieron al inicio que se diera difusión al asunto para tener repercusión mediática, porque en ese momento le podía interesar».