El Nolotil ha estado en nuestras vidas desde que prácticamente tenemos consciencia. Es un medicamento que sirve para bajar la fiebre, calmar el dolor y reducir la inflamación. El problema ha llegado cuando una asociación de pacientes británicos ha emprendido acciones legales contra el Gobierno de España por los efectos adversos que el Metamizol, que es su forma genérica, causa a las personas de este origen cuando visitan el país. Este miércoles hemos conocido más detalles de lo que sucede con este medicamento con el médico Darío Fernández en Poniendo las Calles.
Es una de las prescripciones con receta más consumidas en Españay forma parte de la terna que los médicos ponen en marcha habitualmente contra el dolor leve y moderado. Las recomendaciones de la Agencia Española del Medicamento siguen siendo las mismas que en 2018 cuando se habló por primera vez de estos casos y se mantuvo su prescripción con una indicación de 575 miligramos, que es lo que contiene una cápsula, hasta un máximo de seis al día y no superar los siete días de consumo. Pero el hecho de que se haya llegado hasta el punto de provocar muertes lo que ha hecho que salte la alerta.
He tomado Nolotil
El Metamizol está prohibido en países como Gran Bretaña, Estados Unidos, India y Australia porque diversos estudios apuntan a que la agranulocitosis tiene una prevalencia mucho mayor en pacientes anglosajones.
Este problema de salud, tal y como explica Darío Fernández en Poniendo las Calles, se trata de una reacción adversa conocida de este principio activo, descrita en su ficha técnica y prospecto, que puede llegar a producir la muerte del paciente. Es por lo que la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios recomienda realizar controles hematológicos en tratamientos prolongados.
Este estamento, tras haber continuado con los estudios desde ese 2018, confirma que la incidencia de agranulocitosis entre los pacientes que inician tratamiento con Metamizol es muy baja, en el rango de uno a 10 casos por millón de personas usuarias, en una población de pacientes representativa de la práctica clínica real en España, incluidos pacientes que estaban en tratamientos durante varias semanas. Por eso, no existe un riesgo tan claro como para prohibir su comercialización como reclaman desde la asociación de pacientes británicos.
La orina se vuelve de un color distinto
Pero Darío Fernández señala en Poniendo las Calles un nuevo efecto secundario que podías desconocer. «Es un analgésico que es muy efectivo para dolores fuertes, para dolores cólicos, para después de un postoperatorio, incluso para la fiebre alta y que se puede tomar», recalca, «tienen que tomarlo tal como viene bien encerrado en la cápsula, pero tienen que tener cuidado las personas que están tomando medicamentos para la tensión, porque este medicamento, como espasmolítico que es, pues también puede bajar la tensión».
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«Cuidado también las embarazadas, porque puede dilatar el cuello del útero y adelantarnos un parto», señala también el médico, «y sobre todo en las personas que tienen algún problema renal».
Por último, Darío Fernández no deja pasar esta oportunidad de explicar bien lo que provoca el Nolotil al avisar «a la gente que toma este medicamento que si un día ven que su orina adquiere un color rojizo, eso es porque se está eliminando un metabolito, lo que se llama ácido rubazónico, que tiñe la orina de rojo, pero no es nada peligroso».
