Imanol Alguacil, artífice de todo lo que rodea a la Real moderna, se mostró feliz, cómo no, tras empatar en San Siro y obtener el primer puesto del grupo, y tenía claro que no es posible valorar correctamente lo que está consiguiendo el equipo. “Creo que no somos conscientes de lo que estamos haciendo, de lo que logra este equipo. Seguramente dentro de unos años lo valoremos más claramente. Hacer historia en un estadio así y ante un pedazo de rival como el Inter, meterte en octavos y como primeros de grupo. Es increíble”, comentó.

El oriotarra dejó, como siempre, su pildorita propia, acordándose de la pena del vestuario por no poder ganar. “No hemos pensado en otro partido, lo teníamos muy claro y nos vamos con la pena de no ganar, que es lo que queríamos”, indicó.

El momento para el entrenador realista es especial, se nota en cada comparecencia de Champions. “Hemos hecho un partidazo, estoy muy orgulloso de estar aquí con estos chavales. Con muchos llevo mucho tiempo ya, imagina lo que supone para mí conseguir esto con ellos”, resaltó emocionado. Sobre Zubeldia, explicó que tenía claro que había que intentarlo, “pero era duda incluso en el calentamiento. Ha hecho un esfuerzo titánico y ha aguantado lo que ha aguantado”, dijo.

La plantilla, feliz

La plantilla celebró a lo grande el primer puesto, no era para menos. Estaban felices y así lo manifestaron. Oyarzabal declaró estar “realmente felices, orgulloso de lo realizado”, aunque aclarando que están “sin conformarse”. Van a por más. Remiro tenía muy clara la relevancia de lo logrado. “Lo que hemos cumplido hoy es un objetivo muy grande. Demostramos que jugamos ante cualquier rival de la misma manera. Nos da igual quién esté delante”, dijo.

Por su parte, Robin Le Normand se acordó de los aficionados desplazados, entre los que estaban muchos de los familiares de la plantilla. “Ha venido mucha gente, les hemos escuchado durante el partido. Han sido un apoyo, estamos en buen momento y esta es una buena recompensa”, explicó.