Según el Diccionario de la Real Academia, la sinestesia es la «unión de dos imágenes o sensaciones procedentes de diferentes dominios sensoriales». Y eso es exactamente lo que propone el proyecto con el que el empresario alicantino Perfecto Palacio diversifica sus negocios y se adentra en el sector de la hostelería. Un espacio de «gastronomía inmersiva» para el que se ha aliado con Kiko Moya, en lo que también supone el desembarco del chef de L’Escaleta (Cocentaina, dos estrellas Michelin y tres soles Repsol) en Madrid.
Una propuesta que abrirá sus puertas el próximo 20 de diciembre en el centro comercial Caleido, en pleno paseo de la Castellana, y que, de momento, ya ha conseguido colgar el cartel de completo para sus primeros días.
Como explica el director de Sinestesia, Jorge Palacio, la idea surgió durante un viaje que realizó junto a su padre a Colombia, en el que descubrieron un establecimiento que combinaba diferentes experiencias sensoriales. Decidieron investigar y comprobaron que en todo el mundo apenas había cuatro o cinco restaurantes que ofrecieran una oferta similar, y que el único que lo hacía en España cobraba más de 1.200 euros por comensal.
«Nos pareció una buena idea democratizar esta experiencia y acercarla a un público más amplio», explica Palacio. En su caso, el menú cerrado con maridaje costará 270 euros, con maridaje.
Aunque el grupo familiar está presente en sectores muy diversos -que van desde el concesionario de Porsche en Alicante, a los apartamentos turísticos Palacio Salvetti y Barbara 3, pasando por el futuro centro de negocios Nobo o su participación en la tecnológica FacePhi-, la hostelería no era uno de ellos, por lo que decidieron buscar el asesoramiento de la consultora especializada APS.
Fue esta firma la que les puso en contacto con el chef Kiko Moya, que no dudó en embarcarse en el proyecto, para el que ha diseñado todo el menú y ha formado a la plantilla.
Siete mundos
Lo que propone Sinestesia es un recorrido a través de siete mundos, en cada uno de los cuales se aúna un plato con una proyección audiovisual para fusionar el sentido del gusto, con el oído y la vista. Todo en un espacio exclusivo, en el que tan solo caben 16 comensales y en el que la tecnología tiene un papel clave. De esta forma, para su primera propuesta de menú han escogido el título de «¿A qué saben los colores?», en el que tratan de replicar la sensación visual en los platos. Además del maitre y los camareros, toda la experiencia –de unas dos horas y media de duración- está conducida por un actor, que guía a los clientes a través de este viaje.
Para el desarrollo de la marca, el diseño del evento y toda la trama audiovisual, los Palacio contaron con los servicios de Grupoidex; mientras que la dirección artística se puso en manos de los valencianos Socarrats Films.
Como partner tecnológico escogieron a Epson, ya que buena parte de la experiencia consiste en las proyecciones que se realizan sobre las paredes, el techo o la propia mesa del establecimiento, según explica su director, que insiste en que su objetivo es «hacer algo novedoso y diferente dentro del mundo gastronómico, que cada vez tiene más tendencia hacia las experiencias distintas, únicas y exclusivas».
Si todo marcha según lo previsto y la propuesta tiene la acogida esperada, la intención es replicar el establecimiento en otras ubicaciones. Aunque sus impulsores no descartan hacerlo en alguna otra ciudad española –como Barcelona-, el objetivo sería llevarlo a otras grandes ciudades y capitales europeas, que es donde consideran que pueden encontrar un público acorde a la propuesta que han desarrollado.
A este respecto, aunque el establecimiento está abierto a todo tipo de clientes, Jorge Palacio cree que también puede tener un importante nicho en los grupos de empresa o de amigos que buscan una propuesta de ocio diferente.
Tras más de un año y medio de preparación, Sinestesia ya ha albergado a algunos de estos grupos en sus primeras sesiones, aunque no será hasta la próxima semana cuando abra definitivamente sus puertas