Inicio International Sofía Ellar habla de su carrera, sus gustos y su futuro musical

Sofía Ellar habla de su carrera, sus gustos y su futuro musical

16
0

Se hizo superviral en 2021 con su Mademoiselle Madame pero Sofía Ellar ya ha vuelto a su imagen habitual. Su pelo rubio, piel bronceada y estilo boho chic. Aquella etapa, que muchos temieron que fuera permanente, fue una muestra de las ganas que tiene esta artista de 30 años de probar nuevas experiencias. Ahora está en plena promoción de su nuevo single Puro Cuento junto al artista argentino Emanero, pero también ha hecho un villancico con Álex Ubago. De nuevo, una prueba de ese deseo por encontrar la versatilidad en su pequeña parcela de música.

Sofía Ellar comenzó en la música cuando terminaba su carrera, en el trabajo de fin de grado. Estudió administración y dirección de empresas aunque sabía que quería dedicarse a la música, y fueron las redes sociales quienes le garantizaron sus primeros éxitos. Su primer álbum se publicó en 2017 como un proyecto autoproducido y editado por ella, demostrando que la industria musical tenía sitio para un perfil más independiente como el suyo.

Por supuesto, su vida personal también ha copado titulares. En marzo de 2021 se rompió su relación con Álvaro Soler, con quien había pasado la pandemia y había compartido experiencias durante los cinco años anteriores. El artista aseguró meses más tarde que había sido una «decisión tranquila y madura», aunque ninguno de los dos seguía al otro en redes sociales.

Cambio de etapa a los 30

Con motivo del villancico que ha publicado junto a Álex Ubago para Miravia, El Independiente ha hablado con Sofía Ellar. El frenesí causado por el interés en su vida personal ha terminado y lo que ha permanecido es la madurez y el aprendizaje. Ahora la artista asegura estar centrada en su carrera y para el próximo año pide la misma energía positiva que le ha traído hasta aquí.

El Independiente: ¿Cómo estás? En plena promoción, imagino.

Sofía Ellar: Muy contenta y con muchas ganas de seguir esparciendo música y nuevas experiencias por el mundo entero. Ha sido una sensación diferente poder sacar una cosa con un artista argentino que además me consta que está ahora mismo en los Top 50 mundiales.

EI: Justo este año has cumplido los 30, ¿lo sientes como un cambio de etapa?

SE: Me pilló en los Latin Grammy, la verdad. Estábamos en Sevilla y pensé que era el cumpleaños más surrealista. No sé si tenía ganas de celebrarlo, es como que no me ha dado casi tiempo a procesar qué se espera de mí a partir de los 30 o qué espero yo de mí misma, claro. Estoy pensando mucho, leyendo mucho, meditando mucho… Dicen que a partir de los treinta se abre un universo en el que relativizas las cosas todavía más y que a partir de los 40 empiezas a vivir bien, bien.

Sofía Ellar en el evento de Miravia donde presentó su canción con Álex Ubago. Miravia

«No estamos aquí para hablar de nuestro libro sino para escuchar el libro de los demás»

EI: Pero dicen que los 20 es la mejor etapa de tu vida.

SE: Bueno, yo soy una persona muy disfrutona del momento, del aquí y ahora, del carpe diem. Sin pasarnos de carpe diem porque hay que tener planes y mirar al futuro, por supuesto. Pero cualquier cosa, un ratito con un amigo charlando con un café, todo me viene bien. Creo que soy una persona muy abierta a escuchar y aprender de la gente y de cualquier cosa. Que no estamos aquí para hablar de nuestro libro sino para escuchar el libro de los demás que han pasado por aquí y para saber un poquito más de nosotros.

EI: Mademoiselle Madame fue tu momento más viral, ¿cómo ha afectado a tu carrera?

SE: Bueno, fue un personaje creado por mí y en el cual me refugié a nivel personal, del cual aprendí a nivel personal y profesional, no solo por el acting de ser más borde y decir que no. Porque yo soy una persona que siempre dice que sí a todo y luego llego mal y tarde a todo. Y encima voy con un agobio por la vida colocándome a mí misma como el último eslabón.

Entonces Mademoiselle Madame fue un proyecto que surgió porque yo quería hacer diferente música y estilo distinto y no me atrevía a lanzarlo bajo el nombre de Sofía Ellar. Y ese alterego me ayudó a quitarme muchos miedo personales y profesionales, me distrajo mucho montarme todo ese guion y esa película, todos esos meses de ir entreteniéndoos. De haceros pensar que yo estaba cambiando, que me había hecho tatuajes, piercings, las uñas postizas, los labios pintados… y eso me ayudó a contar una historia, una trilogía. Y fue una promo previa al disco Libre, donde ya me liberé yo. Volví a ser yo. Y dije «chicos, tranquilos que esto se ha quedado en un susto».

«Ya no me parece la Sofía inspiracional»

EI: Y sobre todo demostraste que eres muy polifacética y que tienes muchos más lados de lo que cualquiera pueda pensar.

SE: Sí, el tema del acting, que recuerdo una alfombra roja en la que nadie me reconocía, yo pasaba por delante de Nil Moliner o de Dani Fernández, que hemos estado cenando mil veces juntos, y no me reconocían. Las lentillas, el acting, la voz… me quedé con la frustración de pequeña de ser actriz. Siempre me ha gustado interpretar y siempre me ha gustado hacerlo en mis videoclips, y ser más allá de quien compone la canción, contar una historia. Y se me quitó la espinita con esto de Mademoiselle Madame.

Además yo soy una persona que tiene mucho hambre y muchas ganas de hacer cosas en la vida. Y me la jugué mucho porque por el camino la gente que cayó en el anzuelo y pensó «a Sofía Ellar se le está yendo al olla, la dejo de seguir, ya no me parece la Sofía inspiracional». Pero luego volví con una narrativa con trascendencia.

EI: ¿Y has tenido que dar luego explicaciones a gente que no se enteró del último capítulo de la historia?

SE: Lo tratamos de explicar de la mejor manera. Con una psicóloga como es Silvia Congost, con una presentación en Callao a la que llegué en un Ferrari, y fuimos desmontando a Mademoiselle Madame. El mensaje era dar visibilidad a la salud mental con un personaje que entraba en una miseria, en un bucle, en un amor tóxico, en drogas, en alcohol… y llegando casi a la ruina, casi matando a su Johnny Bravo que era su amor tóxico. Y ahí es donde aparezco yo y meto en la cárcel a mi alterego. Una manera creativa de decir «ya se acabó».

La idea era demostrar que todos pasamos por baches pero tenemos que utilizar las herramientas para salir, no a través de Mademoiselle Madame sino de psicólogos. Mens sana in corpore sano.

Sofía Ellar durante un concierto celebrando a España en la Liga de Naciones
Sofía Ellar durante un concierto celebrando a España en la Liga de Naciones. Oscar J. Barroso / Afp7 / Europa Press

«Se nos llama la generación de cristal pero luego poco se comenta de las pocas oportunidades que tenemos»

EI: Me decías que de pequeña querías ser actriz, ¿es algo que tienes todavía en mente?

SE: No es que me planteara ser actriz, es que yo desde pequeña le decía a mi madre que iba a ser cantante. Y me encantaba Lluvia de estrellas. Y en mi casa me dijeron que muy bien pero que tenía que estudiar. Querían prepararme para el mundo laboral que no es fácil. Se nos llama la generación de cristal pero luego poco se comenta de las pocas oportunidades que tenemos, y cómo se nos trata… y como si ya entramos ya en la deuda que tenemos como país o en temas económicos y macroeconómicos… a mí me prepararon para todo lo que pudieron y eso la verdad es que no puedo dejar de agradecérselo a mis padres.

Gracias a ellos estudié Administración y Dirección de empresas y me ha ayudado mucho en mi carrera, me ha dado muchísimas herramientas. Y gracias a ellos pude seguir trabajando en mi sueño porque es un mundo muy complicado donde también, donde hay un montón de factores injustos.

«Es un mundo muy complicado donde hay un montón de factores injustos»

EI: El éxito en la música muchas veces no va a acompañado de un éxito económico, ¿a ti te ha permitido vivir de manera estable?

SE: Bueno, el que se dedique a la música o decida hacerlo creo que nunca lo hace por dinero, la verdad. Yo creo que el que se dedica a esto lo hace por amor al arte, y el que inventó esa frase sabía lo que decía. Es una manera de vivir y por supuesto hay momentos donde uno puede permitirse un costearse y vivir de eso y luego por supuesto están todos esos bajos en este mundo tan diverso y montaña rusa.

Hay momentos en los que lo que haces funciona y tu discográfica te apoya y otros en los que no. Ahora por ejemplo lo está reventando el urbano. Pues ahora todo el mundo a hacer urbano. Ahí ya cada uno tendrá que decidir hasta dónde baja la bandera, hasta dónde se siente cómodo transformando su música.

¡Y yo lo he hecho! Me he hecho un reguetón romántico sin perder mi estilo, yo creo, me acabo de hacer un rap, como una fusión pop fresquita sin dejar de ser yo. Puedes reinventarte mientras mantengas tu esencia.

EI: También la música que creas refleja diferentes etapas de tu vida o «eras» como dice Taylor Swift.

SE: Literalmente, además siendo cantautora es importante trazar una historia, una línea de tiempo, para que la gente vaya creciendo contigo y la gente pueda identificarse con tu historia. Sobre todo cuando escribes cosas autobiográficas, que mayoritariamente es mi caso. Por ejemplo, la última canción con Emanero yo llegué y él estaba agotado, tenía un jet lag horrible, y estábamos en un campamento de composición.

Él pensaba que iba a salir un churro porque no tenía ganas de nada y entonces llegué yo con toda mi energía y empecé: «Te cuento: vamos a hacer una historia de una Caperucita Roja y un Peter Pan que no sabe ni por dónde le sopla el viento, entonces tú vas a ir de víctima y yo voy a ir de chulita y de que te den. Tú me la has pegado con otra y tal y cual».

Y él me dijo que le gustaba y que iba a hacer esto y esto otro. Nos separamos, cada uno se puso en su mentalidad de escribir, y luego nos volvimos a juntar. Y la moraleja de esta canción es así. Todo es muy autobiográfico cuando hablas de una autora como Taylor Swift, se dice siempre de broma que cuando tiene nuevo novio prepárate que se viene nuevo disco. Los que componemos sentimos que las canciones y ese papel en blanco es nuestro mayor psicólogo. Hay de todo.

EI: Aunque ahora se lleva mucho que el público sepa identificar el momento personal del artista a través de sus letras, como es el caso de Shakira con la sesión de Bizarrap o Marlena con su tema Red Flags, ¿crees que es una herramienta que pueda ser útil?

Escribir canciones que sean como una buena película

SE: Creo que todos hemos podido tener una historia que tenga beef o chicha. Pero yo en mi caso soy muy fan de quien las suelta con mucha elegancia, tener el talento y el don de vestir una canción con una palabrería y una poesía e ingenio que solo el receptor del mensaje y los conocedores reales de la historia digan «qué cabrona, cómo lo ha soltado».

No quiero desacreditar a nadie, porque nunca se me ocurriría hablar mal de ningún compañero o compañera, pero creo que es más fácil hacerte un Shakira-Piqué e ir a por eso que hacer algo que sea como una buena película, que la tienes que ver cuatro veces y cuando la ves la quinta dices «ostras, que no había pillado esto». En ese tipo de detalles y matices ingeniosos está, en mi parecer, el arte detrás de cada canción.

«Soy como prima hermana de Álex Ubago»

EI: Has trabajado con Álex Ubago en el villancico de Miravia, ¿cómo ha sido ese trabajo con un icono como Álex?

SE: Álex es un diez de tío, le he escuchado toda la vida de Dios, le escucho y le escucharé, no solo cuando pegó el pelotazo a nivel mundial. Es un tío que tiene una sensibilidad que yo me siento muy identificada. De hecho, en mis primeras entrevistas en las que me preguntaban cómo definía mi sonido pues empezaba diciendo «pop, con un toque de…» pero terminaba con «mira, es más fácil si te digo que soy como prima hermana de Álex Ubago».

En ese sentido creo que compartimos esa sensibilidad y esa manera de escribir de amor, de lloros, y cómo lo hace de bonito. Tiene ese timbre que cuando abre la boca y canta piensas «es que no puede ser otra persona».
Yo ya colaboré con él en su disco de grandes éxitos, él me quiso proponer una canción de su primer álbum que lo petó y yo nunca lo olvidaré porque estaba pasando por un bachecillo, estaba muy flojita, y le dije «me encanta esta canción pero es que yo quiero esta otra».

Que era una canción que acababa de salir en su último disco que tenía muchas reproducciones pero que no tenía nada que ver con la que me había propuesto él. Pero yo fui muy fiel a lo que esa canción había vivido conmigo, cuántas veces la escuché, cuántas veces la lloré. Hicimos esa canción que se llama Y ahora y fue una maravilla trabajar con él.

«Trabajar con Álex es un gusto, una delicia»

Sofía Ellar solo tiene buenas palabras para Álex Ubago. Miravia

SE: Es un tipo de esos que siempre te pide perdón, que te dice: «Perdón porque voy a ser demasiado tiquismiquis y perfeccionista». Y yo siempre le digo que yo soy igual. Está en todo aunque esté en remoto, porque yo estaba grabando desde aquí las voces de este villancico con Tato de la Torre y él estaba desde Chile. A las cinco de la mañana pendiente, con el teléfono, llamándonos, ofreciendo ideas y cambios.

Acostumbrada a estar en este gremio en el que quedas con alguien o te hacen una entrevista y no saben pronunciar tu apellido bien en el momento en el que estás con alguien que está en todo… da un gusto… Así que trabajar con Álex es un gusto, una delicia, y qué te voy a decir, es un ídolo, a nivel internacional. Y yo creo que ha salido algo muy fresco y muy chulo.

EI: ¿Y te ha dado algún consejo que te haya gustado?

SE: No me lo ha tenido que decir. Tiene una humildad… el otro día en el evento de Miravia me pedía perdón por haberme comido una palabra en el villancico pero lo habíamos hecho genial y no lo habíamos ni ensayado, y él venía con el jet lag directo de Chile. Acaba de llegar de petarlo en no sé cuántos estadios y no se olvida de detalles como una palabra. Es un ser que tiene muchísima luz y muchísima humildad… es de estos ejemplos que te hacen entender cómo se llega lejos.

«Vivimos en un mundo en el que ya no hay trascendencia»

EI: ¿Qué objetivos te pones tú de cara a la próxima década? ¿Qué te planteas para 2024? ¿Con quién quieres colaborar?

SE: Me planteo mucho viaje a Latinoamérica. Porque lo poco que he podido ir pisando es gente que vive muchísimo la música, te recogen, te reciben con los brazos abiertos, eso no lo he visto ni lo he experimentado jamás. Y colaboraciones… no te sabría contestar con nombres. Por supuesto tengo grandes compañeros a los que admiro, por ejemplo hace poco estuvimos en el concierto de Beret en el WiZink, que lo adoro, y da mucho valor a las letras y cuenta cosas. Creo que vivimos en un mundo donde ya no hay trascendencia ninguna, porque las canciones del top 50… el otro día me fui a correr y al ver qué es lo que lo peta aquí me quedé asustada.

Sofía Ellar cantando con Álex Ubago, con quien ya había colaborado en el disco de grandes éxitos del artista.
Sofía Ellar cantando con Álex Ubago, con quien ya había colaborado en el disco de grandes éxitos del artista. Miravia

Es mi opinión. Creo que hay muchas maneras de transmitir algo y de contar, da igual, desde cosa más primaria o primitiva creo que se puede decir con elegancia. Creo que estamos lejos de eso en la mayoría de los casos.
Así que cualquier colaboración, ya tenga doscientos seguidos o doscientos mil, que sea con alguien diga cosas que yo me crea. Por ejemplo, un Carín León, que es mexicano, pero que hace unas canciones preciosas. Todas estas personas que cuentas cosas y tienen talento. Se nota mucho cuando en una colaboración se sientan dos artistas y tienen ese flow o no lo tienen en absoluto.

Sofía tiene claros sus referentes

EI: Porque esa química especial es imprescindible entre dos creadores, ¿no?

SE: Para mí sí. Aunque yo he visto de todo. Hay personas que son mucho más frívolas que piensan cómo puedo conseguir yo el número uno con el número uno. Soy una persona que me muevo muchísimo por el corazón y me dedico a esto, como ya te he dicho esto, por amor al arte. Porque no hay nada más genuino que esa frase: por amor al arte.

Y te puedo dar un clarísimo ejemplo, de una megartista nuestra, española, que lo ultrapeta como es Rozalén, que le están prohibiendo colaborar porque le viene un desconocido y le saca una canción preciosa y ella está tan enamorada de la música que se enreda con todo el mundo a hacer lo que haga falta. Entonces ella es una artista que lo hace por amor al arte, entiendo por qué te dedicas a esto, por qué cuentas tanta verdad y por qué llegas al corazón de las personas.

EI: Ha sido un placer, Sofía.

SE: Perdona que me he enrollado como las persianas.

EI: ¡Para nada, no me pidas perdón! Ha sido un placer y me ha encantado oírte hablar.

SE: Gracias por tu tiempo.