Nunca subestimes el poder de una mujer que ya no tiene nada que perder. Oficialmente hemos inaugurado la temporada de empacho y relleno, y ya sabes, ahora todo es ganancia. Se avecinan festividades por doquier, con ágapes de ricas viandas y los mejores caldos que se distribuyen en mesas muy bien dispuestas. Mi fuerza de voluntad está pasando por un momento complicado, así que no me queda más remedio que proclamar a los cuatro vientos: «de perdidos al río».