“Se dedicó a agredir con puñetazos sobre todo a un niño de nuestro equipo”

Lemes ha querido aclarar que las afirmaciones del equipo contrario son «absolutamente falsas». Aunque reconoce que «no conocen exactamente lo que sucedió», ha indicado que el desenlace del partido fue el desencadenante de la pelea. Además, ha explicado que sus jugadores le «informaron que fue el joven del P.D.C. quien los atacó por un penalti».

Desde el Sporting Tías van más allá al argumentar que las lesiones del presunto agredido fueron resultado de golpear a «más de un niño» y han concluido que «el parte de lesiones que tiene en la mano es por los golpes que dio». Desde el club conejero han defendido su perspectiva de los hechos, que difiere considerablemente de la versión proporcionada por la dirección del Club Deportivo de Puerto del Carmen. Según el equipo de Tías, la pelea fue solo con un joven, no con más. «Se dedicó a agredir con puñetazos, sobre todo, a un niño de nuestro equipo», ha enfatizado Lemes.

Además, asegura que las palabras del presidente son «una burla» y que han aprovechado para «excusarse en insultos racistas». «Han esperado hasta el jueves para condenar los hechos; están viendo que se les ha descubierto, y deciden exagerar esto para ver si pueden salir airosos», se queja Lemes. Lemes critica que el equipo de Puerto del Carmen «no denunció» desde el primer momento los insultos racistas, prefiriendo en su lugar «insultar al árbitro» del partido por redes sociales. «Es increíble. En lugar de condenar el acto racista y violento, se ponen a insultar al árbitro en Facebook». Según Lemes, fue el coordinador del P.D.C quien comenzó a «hablar mal sobre cómo el árbitro había arbitrado el partido». Apunta que tienen «mal perder», una actitud que solo provoca que «los jugadores se exalten más», añade.

Desde la dirección del club de Tías, se han posicionado a favor de sus jugadores y de lo relatado por el árbitro. «Me fío más del acta arbitral que de lo que dice el presidente«, ha añadido el directivo, mostrando su enojo con el equipo rival. «No tienen tacto, y tampoco se han puesto en contacto con nosotros», ha asegurado. Desde el Sporting Tías han anunciado que «van a desmentir todo en un comunicado» y «condenan toda clase de violencia y palabras racistas». Al mismo tiempo, han puntualizado que tomarán medidas en caso de que vuelva a ocurrir algo así. «Si se vuelve a repetir, vamos a expulsar del equipo a los jugadores». Pero destacan que la culpa es de «todos los jugadores».

Esta situación conlleva graves consecuencias para la imagen de ambos equipos. «Es indignante que en los tiempos en los que estamos nos acusen de racistas», concluye el directivo.

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