El entrenador del Sevilla, el uruguayo Diego Alonso, aseguró este miércoles, después de que su equipo perdiera 2-3 ante el PSV Eindhoven, resultado que les deja ya sin opciones de estar en los octavos de final de la Liga de Campeones ed fútbol, que «hay que seguir creyendo y empujando».
El preparador sevillista apuntó en la sala de prensa del estadio Ramón Sánchez-Pizjuán que «evidentemente hubo un antes y un después de la expulsión, porque el equipo estaba haciendo un gran partido y en la primera parte se pudo ir con un 2-0 o 3-0».
«A partir de la expulsión creo que, a este nivel y en la Liga española también sucede, se paga porque es la máxima competición a nivel de clubes. Todo lo demás el análisis pasa a ser distintos», insistió Diego Alonso, quien no quiso valorar públicamente la expulsión del argentino Lucas Ocampos con dos tarjetas amarillas en los minutos 63 y 66.
«El responsable del equipo soy yo», destacó el uruguayo, quien también subrayó que siente «el respaldo del club y de los futbolistas», en alusión a los malos resultados tanto en LaLiga como en la ‘Champions’, que no ha podido superar desde que llegó el pasado octubre en sustitución de José Luis Mendilibar.
«Hicimos un gran partido durante sesenta minutos. Cometimos errores que nos costaron caros, pero uno tiene que seguir transmitiendo su idea, mantenerse firme, que te vean convencido de lo que uno quiere. Era complicado jugar hoy por la presión que había y el equipo se atrevió con un gran rendimiento colectivo e individual», argumentó.
Lee también