El Atlético de Madrid está de dulce. Saben sufrir cuando el rival aprieta, son certeros en ataque y la suerte les acompaña. Ante el Feyenoord firmaron una gran actuación. Una más esta temporada. No se amilanaron con el buen inicio de su rival y aprovecharon sus ocasiones para enmudecer de Kuip y sellar de forma matemática su pase a los octavos de final de la Champions League. [Narración y estadísticas del Feyenoord – Atlético]
Los de Simeone disputaron un encuentro muy serio. Mantuvieron el control en muchos tramos del choque y supieron sufrir cuando más apretó el Feyenoord. Se adelantaron antes del primer cuarto de hora con un tanto en propia de Geertrudia y Mario Hermoso puso la guinda con una obra de arte en los primeros compases del segundo tiempo.
Ahora, con el objetivo cumplido, el conjunto rojiblanco se jugará el primer puesto del grupo en la última jornada frente a la Lazio. Los italianos también hicieron los deberes y el Metropolitano dictará sentencia el próximo 12 de diciembre. A los del Cholo les vale el empate para ser primeros.
Sin miedo
El Feyenoord empezó muy agresivo. No podía ser menos, jugaban ante su público y necesitaban los tres puntos para seguir con opciones de pasar a los octavos de final. Mucha velocidad de balón, centros laterales y poniendo en pequeños apuros a un Jan Oblak que se mostró muy seguro.
Sin embargo, el Atlético no se amilanó. Este inicio podría formar parte del transcurso del partido y lo aceptó sin problemas. Replegado, con las líneas juntas, los de Simeone hicieron mucho daño en las transiciones. Griezmann fue el hilo conductor de todo y el encargado de lanzar los contragolpes de su equipo. Y así llegó la primera ocasión clara del partido.
Los colchoneros salieron muy bien tras una pérdida de balón del Feyenoord y en cuestión de cuatro pases se plantaron ante la meta rival. Sin duda, la clave fue el pase de espuela de Griezmann a Morata para dejarle solo y con tiempo de sobra para definir. El delantero español remató algo centrado y Bijlow salvó a los suyos con una buena mano.
No hubo apenas tiempo para las lamentaciones en el cuadro rojiblanco. Tampoco para la celebración del respetable de De Kuip. En la siguiente acción, a la salida de un saque de esquina, el Atlético se adelantó en el marcador. Fue una jugada rocambolesca con multitud de rechaces y que acabó con un centró de Marcos Llorente al corazón del área que Geertrudia introdujo sin quererlo en su portería.
Mandaba el Atleti y se sentía muy cómodo sobre el campo. Pero el tanto no minó la moral de su rival. El Feyenoord, de nuevo llevado en volandas por su afición, se hizo con el dominio en los últimos compases de la primera mitad. Sin embargo, no gozó de acciones claras de gol y se marchó por debajo en el marcador al descanso.
Golpe definitivo
Debía reaccionar el Feyenoord. Estaba fuera de la Champions y necesitaba marcar dos goles en cuarenta y cinco minutos para seguir con el sueño. Comenzaron con fuerza, igual que en la primera mitad. Encajaron un gol a los pocos minutos, igual que en la primera mitad.
Esta vez, el tanto no fue cuestión de mala suerte. Fue más bien una cuestión de genialidad. Pablo Barrios, con el balón en la frontal, picó un balón en dirección a Mario Hermoso, que dejó un remate acrobático para la galería y puso el balón lejos del alcance del guardameta local.
De Kuip se volvió a encender a falta de algo más de diez minutos con un tanto de Wieffer a la salida de un córner. Pero el ruido duró un visto y no visto. De nuevo, un gol en propia de los locales acabó por matar el partido y puso fin a la aventura del Feyenoord en esta edición de la Champions.
Feyenoord 1-3 Atlético de Madrid
Feyenoord: Biljow; Geertruida, Trauner (Milomba, m. 63), Hancko, Hartman; Wieffer, Stengs (Invanusec, m. 70), Timber (Sauer, m. 78); Minteh (Lingl,m. 63), Santi Giménez, Paixao (Ueda, m. 46).
Atlético de Madrid: Oblak; Molina, Witsel, Giménez, Hermoso, Riquelme; Llorente (Barrios, m. 56), Koke (Correa, m. 84), De Paul (Saúl, m. 74); Griezmann y Morata (Memphis, m. 74).
Goles: 0-1, m. 15: Geertruida, en propia puerta. 0-2, m. 58: Hermoso. 1-2, m. 77: Mats Wieffer. 1-3, m. 81: Santiago Giménez, en propia puerta.
Árbitro: Anthony Taylor (Inglaterra).
Incidencias: partido correspondiente a la quinta jornada del grupo E de la Liga de Campeones, disputado en el estadio Feyenoord ‘De Kuip’ de Rotterdam ante unos 42.000 espectadores.
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