BILBAO, 25 (EUROPA PRESS)

El Lehendakari, Iñigo Urkullu, culminará su tercera y última legislatura con la determinación de trabajar hasta el final en las tareas que le quedan pendientes a su Ejecutivo. Cuando ya se ha hecho oficial que no volverá repetir como candidato a la presidencia del Gobierno Vasco por el PNV y a la espera de que convoque las elecciones autonómicas que pondrán fin a su mandato, ha emplazado a sus consejeros a no desistir en su trabajo porque «queda mucho por hacer».

«Trabajador incansable», calificativo que quienes le conocen atribuyen siempre a Urkullu, cuando saltó este pasado viernes la noticia de que los jeltzales no le propondrían de nuevo como aspirante al Lehendakari, sin confirmación formal por la Ejecutiva del PNV, animó a los miembros de su Gobierno a cumplir los compromisos que habían adquirido con sus electores y con la sociedad vasca.

Es algo que hoy ha vuelto a recordar el portavoz del Gobierno Vasco y consejero de Cultura y Política Lingüística, Bingen Zupiria, cuando ha asistido a un acto de Euskaltzaindia en Getaria (Gipuzkoa). A través de una comunicación, el Lehendakari les transmitió que debían trabajar «hasta el último momento con todas las fuerzas».

Se trata de un mensaje repetido incansablemente en los últimos meses, cuando las diferentes formaciones políticas tenían la vista puesta en los próximos comicios de 2024, mientras en el Parlamento vasco quedaban leyes esenciales para aprobar.

El anuncio de que no repetirá como candidato del PNV y de que, en su lugar, se propone al diputado foral del Departamento de Infraestructuras y Desarrollo Territorial, Imanol Pradales, ha disparado otra vez los rumores de que las elecciones se podrían convocar sobre el mes de marzo, y no en junio, junto a las europeas, otra opción que se barajaba.No obstante, es prerrogativa de Iñigo Urkullu convocarlas y él tiene la última palabra sobre la fecha.

La formación jeltzale ha justificado la sustitución de Urkullu por Pradales en el relevo generacional, justo en un momento crucial cuando existe más temor en el PNV de que EH Bildu le pueda arrebatar la hegemonía en las próximas elecciones.

PACTISTA

Urkullu, nacido en Alonsotegi (Bizkaia) el 18 de septiembre de 1961, casado y con dos hijos y una hija, tiene una larga trayectoria política e institucional. Ha sido Lehendakari durante tres legislaturas, desde 2012. Con un talante «pactista», pudo recuperar la coalición del PNV con el PSE-EE, rota hacía años, para garantizar la estabilidad del Gobierno Vasco.

Convencido de la necesidad de convivencia, aunque «profundamente nacionalista», siempre ha huido de vías como la unilateralmente adoptada en Cataluña con el ‘procés’, para evitar fracturas sociales en Euskadi, aunque sin renunciar a sus postulados de lograr «más y mejor autogobierno» en Euskadi, y avanzar en una relación «bilateral» con el Estado.

De hecho, medió, a petición del expresident Carles Puigdemont, para evitar la Declaración Unilateral de Independencia (DUI) y la aplicación por el Estado del artículo 155, sin éxito, ya que el líder catalán incumplió la palabra que le dio de convocar elecciones en Cataluña.

Urkullu también ha sido un claro defensor de la convivencia y reconciliación tras el fin de la violencia de ETA, pero con «memoria». Siempre ha apostado por la «deslegitimación del terrorismo», por reforzar los principios y valores éticos y democráticos, e «impulsar la defensa y promoción de los derechos humanos. En numerosas ocasiones ha reclamado a EH Bildu «autocrítica» con el daño «injusto causado» y reconocimiento de que ETA «nunca debió existir».

Entre 2007 y 2012, Iñigo Urkullu fue presidente de Euzkadi Buru Batzar del PNV. Previamente presidió la Ejecutiva Territorial de Bizkaia (BBB) durante ocho años.

En sus cuatro legislaturas como parlamentario por Bizkaia en el Parlamento Vasco (1994-2007), fue miembro de diversas comisiones, como la de Educación y Cultura, la Comisión Especial sobre Autogobierno, o la Comisión de Urgencia Legislativa, Reglamento y Gobierno, entre otras. También fue presidente durante tres legislaturas de la Comisión de Derechos Humanos (1998-2008). Integró el Consejo Asesor de Euskera (1994-2001) y previamente el Consejo Social de la EHU-UPV (1986-1989).

De formación profesor, estudió Magisterio con especialidad en Filología Vasca, y ejerció la docencia en Asti-Leku Ikastola de Portugalete y en el Colegio Público Félix Serrano de Bilbao, tras obtener su plaza en la enseñanza pública.