Joana Sanz ha roto su silencio. Diez meses después del ingreso en prisión de Dani Alves, la modelo se ha sentado por primera vez en un plató de televisión para explicar cómo ha vivido y cómo le afecta la situación en la que se encuentra el que todavía es su marido.
Joana Sanz, ‘¡De viernes!’
La entrada en prisión del futbolista se produjo una semana después del fallecimiento de su madre. Para la modelo, lo importante seguía siendo la pérdida que acababa de sufrir: «Me entero por la televisión. Fue cómo un jarro de agua fría. Lo esencial para mí era mi madre, él, para mí, era secundario».
Durante la entrevista, Sanz se negó a responder cualquier pregunta relativa a la presunta agresión sexual por la que su marido sigue en prisión preventiva: «Eso es un tema judicial. Yo hablo de infidelidad, que es lo que a mí me toca. Del tema judicial no voy a hablar porque no me corresponde».
Joana Sanz, en ‘¡De viernes!’
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La modelo confirma que quiso divorciarse, pero él se negó: «Seguimos casados, se habló de divorcio pero él no me lo quiso dar. No nos vamos a divorciar, de momento. En un momento inicial, fue él que me dijo que no me iba a dar el divorcio«. La pareja sigue hablando a diario por teléfono, pero no sabe decir qué tipo de relación mantienen: «No lo sé ni yo. Seguimos hablando por teléfono como si nada sucediera, nos apoyamos mutuamente. El amor está, independientemente de casados o no casados».
