El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reiterado ante el presidente israelí, Isaac Herzog, su condena por el ataque terrorista de Hamás y el derecho de Israel a defenderse pero ha esgrimido que la respuesta «no puede implicar la muerte de civiles inocentes» en la Franja de Gaza, incluidos miles de niños.

Al inicio de su encuentro, en el que también ha participado el primer ministro belga, Alexander de Croo, Sánchez le ha asegurado que España «comparte el dolor» de los israelíes por el ataque que llevó a cabo Hamás el pasado 7 de octubre y se ha felicitado de la inminente tregua que permitirá la liberación de parte de los rehenes.

Israel tiene derecho a defenderse, ha sostenido una vez más el presidente, pero «la respuesta no puede implicar la muerte de civiles inocentes en Gaza, incluidos miles de niños», ha reivindicado, insistiendo en la necesidad de proteger a los civiles «cueste lo que cueste». Asimismo, ha defendido la necesidad de permitir la entrada de ayuda humanitaria a Gaza de forma sostenida para evitar que pueda haber personas que mueran de hambre en este territorio.

El presidente ha defendido que la Autoridad Palestina es quien debería «asumir la responsabilidad» sobre Gaza una vez cesen las hostilidades con el acompañamiento de la comunidad internacional. «Para conseguir esto, debe comenzar la diplomacia», ha subrayado, apostando por la realización de la solución de dos estados.

En su opinión, «esta es la mejor vía para derrotar el terrorismo» y para garantizar la seguridad a largo plazo de Israel. El presidente ha aprovechado para reiterar su propuesta de una conferencia internacional de paz «lo antes posible» que permita avanzar hacia una solución que incluya «el establecimiento de un Estado palestino viable».

«Israelíes y palestinos tienen derecho a vivir en paz y seguridad, pero necesitamos el compromiso de la comunidad internacional para que esto ocurra», ha rematado Sánchez, que ahora se encuentra reunido con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.