El atentado contra Alejo Vidal-Quadras fue cuidadosamente planificado durante meses por un grupo de personas. La investigación de la Policía Nacional ya tiene el primer dato objetivo de los pasos que dieron los terroristas y quienes les ayudaron. El pasado mes de septiembre, según ha sabido CASO ABIERTO, dieron el primer paso en España. Fue entonces cuando un joven albañil de Mijas (Málaga) compró y puso a su nombre la motocicleta con la que se iba a cometer el atentado.
La investigación de la Brigada Provincial de Información de Madrid y la Comisaría General de Información de la Policía Nacional descarta que este joven de 22 años supiera para qué iba a ser utilizada esa BMW. No forma parte del grupo terrorista, fue engañado. Le dieron dinero («unos 500 euros») simplemente para que pusiera la moto a su nombre.
En AVE a Madrid
Luego, le pidieron que actualizara el seguro de la motocicleta para evitar problemas fortuitos o algún incidente de Tráfico. Para realizar todos los trámites, viajó en tren desde Málaga a Madrid. Lo hizo en compañía del hombre que luego iba a disparar a Vidal-Quadras.
Paralelamente, varias personas vigilaron a Vidal-Quadras al menos durante semanas en las proximidades de su domicilio en Madrid, donde finalmente cometieron el atentado. Entre ellos está el detenido en Lanjarón (Granada), un español converso al islam en su rama chiita, la que dirigen los ayatolas de Irán. De hecho, el gobierno iraní declaró en octubre de 2022 «terrorista» a Vidal-Quadras, conocido defensor de los opositores iraníes.
La pareja del musulmán converso, una mujer inglesa, también ha sido detenida. Se trata de una joven de buena familia que vivía en Lanjarón junto a su madre y al detenido ahora. No se han encontrado pruebas que vinculen a la mujer con el plan para matar a Vidal-Quadras.
La Policía trata de esclarecer la conexión entre este hombre y el sicario, un ciudadano francés de origen tunecino que había asesinado a una persona en París y aceptó el encargo para matar al político español.
El musulmán de Granada y el sicario viajaron a Madrid y se alojaron en un hotel la noche anterior al atentado
Lo cierto es que los dos, el musulmán de Granada y el sicario, viajaron a Madrid y se alojaron en un hotel la noche anterior al atentado. El 9 de noviembre, los dos acudieron a la zona próxima al domicilio del político, que ya habían visitado antes en varias ocasiones. Esta vez, el sicario llegó solo, en la motocicleta que estaba a nombre del albañil malagueño. El converso lo hizo en un coche, según las investigaciones policiales
El sicario esperó la llegada de Vidal-Quadras hacia su domicilio y se acercó a él, con el casco puesto, y sin mediar palabra le disparó un tiro en la boca. Luego, se fue, solo, conduciendo la motocicleta. En la fuga le acompañó, conduciendo el coche, su cómplice granadino. Ambos, según las pesquisas, quemaron la motocicleta y la abandonaron cerca de Fuenlabrada (Madrid).
El sicario sigue fugado. Francia le reclama por otro asesinato, este sí, consumado, cometido en París. Allí tiene, además, unos cuarenta antecedentes por diferentes delitos.
Un cuarto hombre
La Policía Nacional trata de averiguar ahora quién pagó por sus servicios. De los datos obtenidos hasta el momento no parece que el musulmán granadino tuviera capacidad ni contactos para hacerlo. De ahí que se esté buscando a una cuarta persona, implicada directamente en la preparación del atentado contra Vidal-Quadras, un plan muy minucioso y elaborado durante meses.