El espacio entre la Tierra y Marte suele estar repleto de datos científicos que van y vienen, provenientes de casi una docena de misiones en el Planeta Rojo. Pero durante aproximadamente un día y medio en este mes de noviembre, la comunicación entre los planetas se silenciará cuando Marte pase detrás del Sol, interrumpiendo la activa comunicación interplanetaria. Además, las transmisiones se verán afectadas en mayor o menor magnitud hasta los primeros días de diciembre.
A lo largo de la denominada temporada de conjunciones, la corona del Sol interfiere con las señales de radio utilizadas para comunicarse con las misiones a Marte. En concreto, entre principios de noviembre y el inicio de diciembre de 2023, las naves espaciales que se encuentran en el Planeta Rojo pueden tener complicaciones para recibir las señales enviadas desde la Tierra, de la misma forma que nosotros tendremos inconvenientes para enviar comandos desde nuestro planeta.
Según informa la Agencia Espacial Europea (ESA) en una nota de prensa, la conjunción solar de Marte ocurre aproximadamente una vez cada 25 meses. Cuando esto sucede, Marte se encuentra en el lado opuesto del Sol a la Tierra. Esa ubicación es la que genera problemas de comunicación entre los planetas a lo largo de un mes, e incluso un silencio total de alrededor de 36 horas, en las cuales las naves espaciales, correspondientes a cerca de una docena de misiones activas en el Planeta Rojo, se quedan congeladas y sordomudas mientras Marte desaparece detrás del Sol.
Comunicaciones limitadas
Los científicos aclaran que el período de tiempo durante el cual las comunicaciones sufren desperfectos depende también del tamaño y la potencia del equipo de comunicaciones de la nave espacial en Marte, aunque normalmente tiene lugar mientras el ángulo en el cielo entre el Sol y Marte, apreciado desde la Tierra, está entre 3 y 4°. Como resultado de esta interrupción, los controladores de la misión no pueden enviar comandos ni recibir datos de manera confiable desde Marte, siendo imprescindible que tomen precauciones especiales para garantizar la integridad de los equipos y la preservación de los datos.
La ESA aclara que en función de la perturbación de la atmósfera del Sol durante la temporada de conjunciones, es necesario reducir la cantidad de datos que la agencia espacial intercambia con las misiones Mars Express y ExoMars Trace Gas Orbiter. En términos prácticos, esto significa que la cantidad de datos que se envían a las naves espaciales en Marte desde la Tierra se reduce de 2000 bits por segundo a solamente 250, mientras que la transferencia de información desde el Planeta Rojo hacia la Tierra se limita a 300 bits por segundo.
Este tipo de consideraciones especiales durante el período de interrupciones en la comunicación entre Marte y la Tierra también son puestas prácticas por otras agencias espaciales con actividad en Marte, como la NASA o la Administración Espacial Nacional de China (CNSA). Además, la ESA aclaró que debe configurar de una forma diferente a la habitual sus estaciones terrestres Estrack, llevándolas a la máxima potencia de transmisión para asegurarse así que la nave espacial en Marte recibe adecuadamente las instrucciones.
Una conjunción particular
Vale destacar que la conjunción de 2023 es inusual porque será la primera vez que Marte pase detrás del disco del Sol desde que llegaron las dos naves espaciales de la ESA. Mars Express lo hizo en 2003 y ExoMars Trace Gas Orbiter se ubicó exitosamente en la órbita marciana en octubre de 2016. «Al comienzo de la misión, el equipo fue muy cauteloso con las conjunciones. Si algo sale mal durante este período, podría ser difícil recuperar la nave espacial hasta que termine», indicó en el comunicado el director de operaciones de naves espaciales de Mars Express, James Godfrey.
“En principio suspendíamos todas las operaciones científicas. Pero en 2019 descubrimos que podemos seguir usando algunos de los instrumentos de forma limitada, siempre y cuando todos los comandos se carguen antes de que comience la temporada de conjunciones y todos los datos científicos se almacenen a bordo hasta que finalice este período», agregó Godfrey.
El día y medio de “silencio total”, que ocurrió del 17 al 18 de noviembre, parece haber pasado sin mayores complicaciones. Sin embargo, estas “ventanas” de comunicación limitada o imposible entre la Tierra y Marte plantearán un gran desafío para los futuros colonos humanos en el Planeta Rojo: los científicos de las distintas agencias espaciales ya están trabajando para encontrar soluciones al respecto.