La concentración diaria en las inmediaciones de la sede del PSOE en Ferraz ha contado este lunes con un millar de personas y se ha saldado con un detenido, según la Delegación del Gobierno y, como novedad, la Policía ha impedido esta vez a los manifestantes invadir la calzada bajo amenaza de sanción. En esta decimoctava jornada consecutiva de protestas, las fuerzas de seguridad del Estado ni siquiera ha cortado con vallas el acceso a la calle, como ha hecho todos estos días, y se ha limitado a contener a los manifestantes en las aceras para evitar cortes de tráfico.

La persona detenida lo ha sido por desobediencia y atentado contra la autoridad, ha informado la Delegación del Gobierno en Madrid. Este lunes ha sido la primera ocasión en los últimos días en que la Policía no ha cortado la circulación en Ferraz y ha advertido a los concentrados de que no podían invadir la calzada. El argumento era que la protesta no había sido comunicada, si bien la mayor parte de los días previos tampoco ha mediado notificación de la protesta.

Invadir la calzada

A las 19:30 horas, un pequeño grupo se concentraba ya en las escalinatas de la Iglesia que hace esquina con Marqués de Urquijo para rezar el rosario. Minutos después, la Policía les informaba de que no podían pisar la calzada y debían quedarse en la acera. De hecho, los agentes han identificado a aquellos manifestantes que han tratado de cruzar la calle. Esto ha provocado que se formasen tres grupos, a cada lado, y que los manifestantes reprocharan a la Policía su actuación con pitos y gritos de «libertad, libertad», «fuera, fuera», o «qué vergüenza».