La posición de Podemos con respecto a la formación del Consejo de Ministros del nuevo Gobierno de Pedro Sánchez, solicitando la permanencia de Irene Montero al frente de Igualdad, está tensando las relaciones entre las formaciones que lideran Yolanda Díaz, Sumar, e Ione Belarra, cuando en el horizonte se presenta ya un nuevo ciclo electoral con los comicios autonómicos en Galicia y País Vasco, además de los europeos. Su posible alianza está en riesgo si Podemos confirma su amenaza de romper con Sumar y actuar de forma autónoma en el Congreso con sus cinco diputados.

En el caso gallego, este espacio parte con una doble desventaja. Por un lado, es extraparlamentario al no haber logrado representación en el Pazo do Hórreo hace tres años con la candidatura que encabezaba Antón Gómez-Reino. Y por otro, cuando restan como mucho ocho meses para la cita con las urnas, no se sabe todavía si existirá alianza ni mucho menos quién será la persona designada para liderar esa lista.

Fuentes de la formación de la vicepresidenta del Gobierno en funciones apuntan que el entendimiento con Podemos en Galicia es mayor que a nivel estatal, gracias a la ascendencia de Yolanda Díaz.

Y es que a pesar de las animadversiones causadas por las divisiones internas que provocaron la fractura de AGE y En Marea, desde Sumar consideran un aval a la figura de su líder haber logrado en las pasadas generales dos diputados, uno más que el BNG.

Por todo ello, existe optimismo acerca de la posibilidad de alcanzar un acuerdo que permita que Podemos se integre en su candidatura. Sin embargo, las mismas fuentes reconocen que es todavía prematuro aventurar el alcance del mismo, ya que aclaran que, previamente, hay que ver como pueden afectar las negociaciones para la formación del Gobierno estatal y la posible escisión parlamentaria de Podemos, que convertiría en quimérica esa posible alianza. .

El secretario general de Podemos en Galicia, Borja San Ramón, confirmó a este periódico que las negociaciones para aliarse en las autonómicas están ya en marcha y no las restringe únicamente a Sumar, si bien mantiene nulo vínculo con antiguos aliados como Anova. Eso sí, señala que “para llegar a un acuerdo se tiene que dar un proceso que no repita los errores que hubo en las generales”, donde Podemos se quejó de falta de primarias para configurar las listas.

Sin embargo, el tiempo corre en contra y por ello desde Podemos Galicia consideran que es el momento de intensificar las conversaciones y propiciar un pacto lo más amplio posible.

Cualquier negociación estará condicionada por lo que suceda en Madrid. La profesora de Ciencias Políticas y de la Administración en la Universidad de Santiago de Compostela Paloma Castro sostiene que el resultado de la conformación del Gobierno, después de que Podemos no aceptase la propuesta de Nacho Álvarez como su cuota ministerial, se trasladará a la comunidad, pero “solo reforzará la opción de Sumar”.

Si Podemos rompe con Yolanda Díaz definitivamente, se imposibilitaría, o en el mejor de los casos dificultaría en gran medida, sellar un acuerdo entre ambas formaciones para concurrir en las autonómicas con una candidatura unitaria. Entonces, la formación morada tendría la oportunidad presentándose en solitario y “marcar diferencias con Sumar en un sitio donde no se juega nada”. No obstante, esto complicaría aún más una mayoría alternativa al PPdeG en la Xunta, y “supondría el fin de Podemos en Galicia.

En opinión de esta politóloga, la formación de la vicepresidenta del Gobierno en funciones cuenta en la comunidad con dos ventajas estratégicas que explican su posición de fuerza sobre Podemos de cara a unas posibles negociaciones, más allá del buen resultado en las generales del pasado 23-J. “Por un lado, tiene un liderazgo indiscutible, Díaz, y, por otro lado, el poder de los gallegos en Madrid es claro y se revela también en el papel de Marta Lois, cada vez más consolidada [como portavoz parlamentaria de Sumar]. Podemos no tiene ni liderazgo en Galicia, ni liderazgo gallego en Madrid; es una batalla desigual”, analiza.

Castro destaca el papel de los liderazgos en el juego político –“De nada sirve el consenso sin liderazgo”, alerta la profesora– y, en este sentido, considera que “Sumar tiene que decidir estratégicamente quién es su apuesta en Galicia”, ya que a diferencia de las generales, cuando llegan las elecciones gallegas “el protagonista real es el BNG y esta vez Ana Pontón tiene que ir a por todas”.