La guerra a la izquierda del PSOE se recrudece y Podemos sigue presionando y generando malestar en el seno de Sumar. El reparto de ministerios es el último escollo que ha generado fricción entre Sumar y Podemos después de que los magentas decidieran en primera instancia no darle ninguna cartera del nuevo Ejecutivo a los morados y los morados dieran por hecha la ruptura, con lo que pasarían a dar pasos por libre en el Congreso de los Diputados.

El nivel de tensión ha aumentado tras cerrarse el capítulo de la investidura, en el que Pedro Sánchez ha recibido el apoyo de la Cámara Baja para ser reelegido presidente del Gobierno y tras el que ha empezado el de la formación del nuevo Ejecutivo. En este sentido, aunque Sánchez aún no ha desvelado los nombres que ocuparán las sillas del nuevo Consejo de Ministros, la tensión ya cabalgaba a sus anchas en el seno de Sumar, al trascender que no tenían intenciones de nombrar a ningún dirigente de Podemos como ministro en las carteras que recayesen sobre la formación.

Es así como en Sumar se daba por hecho que tendrían cinco carteras, y para las que no habría nadie de Podemos, momento a partir del cual los morados agudizaban sus presiones al dar casi por hecha la ruptura. Un paso más se ha dado este viernes, cuando Yolanda Díaz ha lanzado la oferta de un ministerio a Podemos a cambio de que cesen las hostilidades contra diputados de Sumar. El nombre que Díaz ha ofrecido es Nacho Álvarez, un diputado que, aunque mantiene el carnet de Podemos, trabaja por y para Sumar y mantiene mala relación con Belarra y la dirección del partido morado -que finalmente ha decidido dejar sus cargos en Podemos y renunciar a ser ministro-.

Como ya se podía prever, este ofrecimiento no ha sentado bien en Podemos. Tanto la secretaria general, Ione Belarra, como el exlíder de Podemos, Pablo Iglesias, han reaccionado tajantes al anuncio, aunque de una forma similar a la que ya había avanzado hace dos semanas Isa Serra, coportavoz nacional de la formación, asegurando que “los ministros de Podemos los elige Podemos”.

En un contundente comentario en redes sociales, Pablo Iglesias ha remarcado que esta “maniobra” de Díaz ya la habían anunciado dos meses antes como estrategia para excluir a la hasta ahora ministra de Igualdad, Irene Montero. “Hace dos meses publicamos lo que hoy Sumar y el PSOE filtran a elDiarios.es. La maniobra es patética y la respuesta de Belarra ejemplar. Yolanda Díaz propone a Nacho Álvarez ser ministro para excluir a Irene Montero”, ha escrito en X, antes Twitter, el exlíder de Podemos.

En la misma línea se ha pronunciado Ione Belarra minutos después de haber recibido el documento de Díaz o de haberse enterado por la prensa, ya que ha recriminado que se haya hecho a la vez. “La formación de gobierno es algo muy serio. De ello dependen las posibilidades de transformación de nuestro país y frenar la ofensiva reaccionaria. En el bloque democrático nos necesitamos todas las unas a las otras, sin vetos”, ha comenzado.

Además, ha añadido: “Pedro Sánchez y Yolanda Díaz han filtrado la noticia a la vez que nos la comunicaban, lo cual parece más una estrategia mediática para justificar que nos echen del gobierno que una propuesta para gobernar en coalición. Como el resto de formaciones políticas, empezando por el PSOE, los ministros de Podemos los elige Podemos. Podemos sigue pensando que lo mejor que puede aportar al Gobierno de Coalición es profundizar las transformaciones feministas al frente del Ministerio de Igualdad”.

Una oferta que cae en saco roto al ver la respuesta del propio Nacho Álvarez: “Agradezco la confianza que Yolanda Díaz deposita en mí, pero no puedo aceptar ser ministro del Gobierno si la dirección de mi organización no lo aprueba”. “En mi cultura política no es concebible aceptar un cargo al margen de la organización de la que uno forma parte”, ha añadido, informando a la par de que deja sus cargos en Podemos tras haber perdido la confianza del partido.

El equipo de Díaz da por hecho que mantendrá una vicepresidencia y el Ministerio de Trabajo, así como otras cuatro carteras que le permitan mantener la cuota que tenía Unidas Podemos en el anterior Gobierno de coalición. Así, con estos cinco ministerios a repartir, Díaz podría repartir poder, en función de sus prioridades, entre los Comuns, Más Madrid e Izquierda Unida, que forman parte de la coalición de partidos a la izquierda del PSOE bautizada como Sumar.

En el momento del pacto de coalición, antes de las elecciones generales del 23 de julio, Podemos firmó el acuerdo que le garantizaba el 23% de los recursos económicos del grupo parlamentario por el que finalmente consiguió cinco escaños, pero poco a poco fueron aumentando los choques con la plataforma de Díaz hasta llegar este miércoles y afirmar Pablo Iglesias que daba por hecha la ruptura.

Pese a encontrarse en una coalición de numerosos partidos y tener una cuota de votantes notablemente inferior a la de años atrás, Podemos ha reclamado autonomía política al espacio de Díaz, sin tener escrúpulos para echar tierra sobre ella y acusándola de ser “servil” al poder.

Fue tras trascender los cinco nombres que se barajan en Sumar para las carteras ministeriales que les tocase (Ernest Urtasun, Mónica García, Pablo Bustinduy, Sira Rego y la propia Yolanda Díaz), cuando en Podemos empezaron a asimilar que no estarían en el nuevo Ejecutivo, aunque el PSOE cediera a Sumar cinco ministerios.

Y la gota que ha colmado el vaso ha llegado tras la oferta de Díaz de un ministerio a cambio de bajar el tono, que cesen los ataques a diputados de Sumar y que los morados se comprometan a concurrir con Sumar en el próximo ciclo electoral, comenzando con las elecciones europeas de 2024. Ahora, esperar a ver si en Podemos aceptan la oferta -aunque sería con un nuevo nombre- o se quedan fuera del inminente gobierno de Pedro Sánchez y Yolanda Díaz.

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